Hablamos con José Núñez, Product Manager y Hugo Ramos, Product Specialist de Canon España para entender mejor la evolución del mercado y las innovaciones que permiten mejorar la resolución y calidad en el resultado final.
La impresión es una parte de un ciclo de procesos que van desde la captura de la imagen hasta llegar finalmente al papel. Canon, con su completa gama de productos, abarca el ciclo completo para dar un resultado óptimo y profesional.
La innovación es esencial para adelantarse a los retos del mercado. Las necesidades en el mundo de la impresión varían según sus aplicaciones, que pueden ir desde el mercado publicitario a la producción artística de fotografías, el uso doméstico y empresarial, entre otras. En el resultado final de una imagen impresa, no solo es relevante el equipo de impresión, también lo son cómo se captura o produce esa imagen original, y por supuesto, cómo se va a reproducir. Una buena elección de la tecnología y los materiales —tinta y papel— va a determinar la fidelidad del color en nuestra reproducción.
de buena tinta
La elección de una tinta adecuada es muy importante. Existen dos tipos de tintas cuando se trata de la impresión digital. Dependiendo de las necesidades del soporte y el uso que se le vaya dar al documento se pueden utilizar tintas pigmentadas o tintas colorantes. Aunque la base para ambas tintas es el agua, la principal diferencia es que las tintas pigmentadas son resistentes a la decoloración y, por lo tanto, son tintas adecuadas también para exteriores.
«Gracias a una nueva formulación, las tintas pigmentadas son resistentes a la incidencia directa de la luz solar y, por lo tanto, recomendables tanto para interiores como para exteriores. Además, si a esto le añadimos los papeles resistentes al agua, esta resistencia al exterior se garantiza incluso sin necesidad de laminación», comenta José Núñez, Product Manager de Canon España.
Las tintas colorantes, por el contrario, solo son recomendables para interior, es decir, no se pueden exponer en el exterior, incluso laminadas, sin poner en juego la consistencia de los colores pasados unos días o semanas.
Las tintas colorantes se caracterizan por ser más rápidas. Penetran más en el papel y realizan mezclas de colores más intensas. «Podríamos decir que son más recomendables para papeles brillo y semi brillo. En cambio, las tintas pigmentadas, penetran menos en el papel, por lo que son más superficiales y sirven para todo tipo de soportes de impresión incluidos papeles mate y Fine Art» continua Hugo Ramos, Product Specialist de Canon España.
«Para que nos hagamos una idea de la importancia de la composición de las tintas, Canon, en toda su gama de impresoras de consumo incorpora un sistema de tintas híbrido en el que se incluye tinta negra pigmentada para la impresión de textos y la tinta colorante para la impresión de fotografías y gráficos», añade José Núñez.
innovación
Sin embargo, como nos explican Hugo Ramos y José Núñez, la composición de la tinta no es la única variable que debemos tener en cuenta. «Los usuarios necesitan que los equipos de impresión digital les ayuden a mecanizar procesos, optimizar tiempos e incrementar los volúmenes de impresión sin renunciar a la calidad —apunta José Núñez—. Y para ello la tecnología y la innovación son claves. A lo largo de la historia del sector, las compañías han intentado aportar su granito de arena en ese camino hacia el futuro».
Efectivamente, muchos de los descubrimientos más importantes de la historia fueron accidentales —desde el famoso baño de Arquímedes y su ¡eureka! hasta la manzana de Newton — y parece que en el mundo de la impresión la evolución es similar.
Hugo Ramos nos desvela que uno de los mayores avances patentados por la compañía fue la tecnología de inyección de tinta térmica Bubble jet. «Un ingeniero dejó por despiste una aguja cargada de tinta cerca de un soldador caliente. A la vista del “accidente” determinó que, en lugar de presión, se pudiera usar el calor para inducir la inyección de tinta. Este hallazgo en 1977 supuso un inmenso avance en cuanto a precisión de impresión y ahorro energético en el proceso», comenta el Product Specialist.
Así es como desde la impresora se da calor al inyector para que lo traslade a la tinta del cartucho hasta que sale una burbuja por el extremo de éste. Esta tecnología de inyección de tinta térmica supuso un gran avance en cuanto a precisión. Como nos cuenta Hugo Ramos, a posteriori, Canon desarrolló una tecnología propia de fabricación de los cabezales de impresión mediante luz, la denominada tecnología FINE (Full-photolithography Inkjet Nozzle Engineering), lo que los hace todavía más precisos y con resoluciones extremadamente altas.
La inyección de tinta convencional pulveriza la tinta en el papel, lo que la hace más vulnerable a alteraciones en el flujo del aire por el movimiento del cabezal de impresión y a cambios en la viscosidad de la tinta por fluctuaciones de temperatura. Esta tecnología funciona de una forma ligeramente diferente. En lugar de pulverizarse, la tinta se expulsa calentándose, lo que la hace menos susceptible a las alteraciones del flujo del aire por el cabezal de impresión y produce un tamaño de gota altamente uniforme, una colocación pareja de los puntos de tinta y una velocidad de colocación 1,5 veces mayor que la de los sistemas convencionales.
«Dependiendo del modelo, el tamaño de gotas de tinta puede llegar hasta 3 picolitros. El resultado es una resolución de impresión de hasta 4800 x 2400 ppp para impresiones excepcionalmente detalladas con una calidad de imagen considerablemente mejorada», apunta el experto.
Una de las últimas aportaciones tiene que ver con la tinta y los colores, apunta José Nuñez, «recientemente hemos sacado al mercado una nueva serie, denominada imagePROGRAF GP, de equipos de 6 y 11 tintas, que proporciona impresiones con un alto atractivo y unos colores vivos gracias a una nueva tinta rosa fluorescente, siendo los primeros en lanzar al mercado una tinta acuosa fluorescente».
la pantalla y el papel
En la búsqueda de la mejor calidad en la reproducción de colores en la impresión, las compañías incorporan tintas específicas y con formulaciones mejoradas, cuyo objetivo no es otro más que el de ampliar la paleta de colores reproducibles (gamut) y de este modo lograr la máxima calidad en las impresiones.
«Nuestro objetivo es reducir al máximo los gaps existentes entre los espacios de color cmyk (espacio utilizado por las impresoras) y el espacio de color
rgb (correspondientes al de los monitores). De este modo, impresoras como la imagePROGRAF PRO-300 y PRO-1000 incorporan tintas negras específicas
destinada a lograr la impresión de negros profundos sobre papeles mate y fieles a la imagen “real” procesada en el ordenador.
También incorporan una tinta específica “Chroma Optimizer”, que actúa como un revestimiento transparente en la impresión para garantizar la uniformidad de los reflejos de la luz en el papel brillante, por lo que hay un nivel de brillo uniforme en toda la superficie y todos los colores se perciben con la intensidad deseada», nos explica Hugo Ramos.
el papel del papel
Porque, valga la redundancia, el papel también juega un papel importante a la hora de conseguir un resultado idóneo y de alta calidad en la impresión. «Elegir el soporte de impresión oportuno te permite crear el aspecto adecuado y transmitir sensaciones. En algunos casos nos permite dar valor añadido a la imagen en función del acabado y condiciona el resultado de la impresión, la estabilidad del color y su durabilidad”, asegura Núñez.
«Nuestro objetivo es reducir al máximo los gaps existentes de color cmyk y el espacio de color rgb»
Canon no fabrica papel, aunque sí los homologa y comercializa bajo su marca una vez han pasado los test de calidad más exigentes, así garantiza que no haya ningún tipo de problema en la impresión y que los resultados sean excepcionales, con una amplia gama de color y una excelente nitidez de líneas. Además, la compañía colabora con varios fabricantes de este sector en todo el mundo. Esta estrecha relación les permite desarrollar nuevos soportes para la impresión de inyección de tinta de alta velocidad.
Buscar nuevas soluciones que permitan aprovechar las ventajas de la impresión digital para que los profesionales puedan imprimir en nuevos formatos y tamaños —o simplemente en diferentes soportes— será clave para el futuro de la industria, así como mecanizar procesos, optimizar tiempos e incrementar los volúmenes de impresión. La innovación forma parte del ciclo completo, desde la captura al soporte final, y queda claro que, es tan importante la tecnología de la máquina como los avances que pueda haber en cuestión de soporte o tintas.
Actualizado 11/03/2022