Los sectores culturales y creativos en España generan más riqueza y empleo de lo que comúnmente se cree. Así lo demuestra el nuevo informe de la Fundación Cotec, presentado esta semana en el Museo del Traje de Madrid con la participación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El documento analiza el impacto económico de la cultura a través de once indicadores clave y sitúa a estos sectores por encima de industrias como la farmacéutica o la textil. Más allá de su dimensión simbólica, el informe propone una visión estratégica: la cultura como motor económico, innovador y productivo para el país.

Los sectores culturales y creativos generan más valor añadido que industrias como la farmacéutica o la textil. Así lo demuestra el nuevo informe de Cotec, presentado por su presidenta Cristina Garmendia en un acto que contó con la presencia de Pedro Sánchez en el Museo del Traje de Madrid.
Bajo el título Los sectores culturales y creativos en España: análisis de su valor económico, el estudio impulsado por Cotec ofrece una radiografía precisa de la cultura como motor económico, social y territorial. A través de once indicadores —que van desde la productividad y el empleo hasta la innovación, el comercio exterior o el turismo—, el documento desmiente la idea de que se trata de un sector frágil, subsidiario o inestable. La cultura, sostiene Cotec, no solo crea identidad y cohesión: también genera riqueza y transforma el modelo productivo.
La presentación del informe, con Pedro Sánchez al frente, ha querido subrayar precisamente esa dimensión estratégica. “La cultura forma parte de la economía del conocimiento”, recordó Cristina Garmendia, presidenta de la Fundación Cotec, quien defendió una nueva mirada hacia estos sectores. Según el informe, los SCC aportan más del 2% del valor añadido bruto (VAB) en España, una cifra superior a la de industrias tan asentadas como la textil, la farmacéutica o la química.
Y no solo eso: la cultura rinde más y mejor. Por cada euro invertido en estos sectores se generan 1,75 euros de valor añadido en la economía española, un efecto multiplicador superior al del turismo (1,70), la construcción (1,67) o la agricultura (1,43). En términos de empleo, el impacto es igualmente notable: por cada millón de euros adicionales de demanda en los SCC se crean 44 nuevos empleos. Además, la productividad media por trabajador en este sector es un 40% superior a la del conjunto del sector servicios.
Cultura que impulsa, empresas que crecen
Uno de los capítulos clave del estudio es el dedicado a la innovación y el emprendimiento. Frente a una caída neta de 155.000 empresas en el conjunto de la economía española entre 2019 y 2023, los sectores culturales y creativos ganaron 28.000 nuevas empresas en ese mismo periodo, lo que supone un crecimiento del 11,6%. No solo resisten: lideran la recuperación.
El informe también destaca una mayor proporción de empresas de alto crecimiento, conocidas como “gacela”, en el ámbito cultural: el 8,5% frente al 7,8% de la media. Y pone el foco en su carácter digital e innovador. El gasto en innovación en los SCC aumentó un 46% entre 2019 y 2022, mientras que en el conjunto de la economía las empresas innovadoras descendieron un 10%. Los sectores culturales, en cambio, cuentan hoy con un 23% más de empresas activas en innovación.
En buena parte, este impulso se ha visto acelerado por los fondos europeos Next Generation EU. Según Cotec, las empresas de los SCC han recibido hasta junio de 2024 un total de 975 millones de euros destinados a I+D+I y digitalización. Esta cifra representa el 9,5% del total de fondos adjudicados en estas dos áreas, casi cinco veces más que la contribución de estos sectores al PIB (2,22%).
Turismo cultural y oportunidad económica
Otro de los puntos que Cotec subraya en su análisis es la importancia del turismo cultural. En 2023, el 22% de los turistas internacionales que visitaron España lo hicieron por motivos culturales, y su gasto diario fue un 17% superior al de la media. En conjunto, el turismo cultural supuso casi una cuarta parte del gasto total de los visitantes internacionales (23,4%).
Estos datos no son anecdóticos. Hablan de un ecosistema capaz de generar valor de forma transversal, que se proyecta sobre otros sectores y territorios. Para Cotec, los SCC no deben ser vistos como un complemento del entretenimiento o una expresión artística desconectada de la economía, sino como un engranaje clave del desarrollo sostenible, con capacidad para atraer inversión, activar empleo de calidad y fortalecer la innovación.

Una paradoja que persiste
Y sin embargo, a pesar de la contundencia de los datos, el informe también pone sobre la mesa una paradoja difícil de ignorar: la cultura sigue sin estar entre las prioridades presupuestarias de la ciudadanía. Según la Encuesta de Percepción Social de la Innovación elaborada por Cotec en 2023, la cultura aparece en sexto lugar entre ocho categorías de gasto analizadas por los ciudadanos.
Esa brecha entre impacto real y percepción pública es, para Cotec, uno de los retos a abordar. En un momento de transformación global, donde la economía del conocimiento y la innovación tecnológica están reconfigurando los modelos productivos, los sectores culturales y creativos ofrecen una oportunidad tangible. Pero para aprovecharla plenamente, hacen falta políticas públicas alineadas, más inversión estable y un relato que conecte con la sociedad.
El informe de Cotec no solo aporta datos: propone una nueva manera de entender la cultura. Una forma de reconocerla como lo que es —un motor de desarrollo económico— y no solo como una expresión artística o simbólica. Con la presentación institucional de esta semana, ese mensaje empieza a ocupar el lugar que le corresponde en la agenda política. Ahora toca ver si se traduce en decisiones concretas.
Actualizado 19/05/2025