La Casa de Carlota es el primer estudio de diseño del mundo que integra de forma activa y vinculante en el proceso creativo y resultado final a diseñadores con Síndrome de Down y autismo. En este contexto, coincidiendo con el Día Internacional del Síndrome de Down, la ONU acogerá hoy en su sede en Nueva York una conferencia en la que se explicará el modelo de trabajo e innovación creativa del estudio español.
La Casa de Carlota, creada en el año 2013, es el primer estudio del mundo en el que trabajan conjuntamente creativos profesionales, ilustradores, estudiantes y diseñadores con autismo y Síndrome de Down.
«Ya no tengo Síndrome de Down, lo he dejado». Así se expresaba uno de los diseñadores que trabajan en la Casa de Carlota cuando el diario The Guardian quiso conocer esta historia. Ahora, el eco del trabajo de integración profesional de este estudio ha llamado la atención de la ONU, que ha convocado a la compañía a su sede central en Nueva York para que comparta su experiencia y día a día.
La conferencia está organizada conjuntamente con la entidad “World Down Syndrome Day” y está dirigida a personas con Síndrome de Down, entidades gubernamentales y entidades de diferentes ámbitos que apoyan, impulsan y desarrollan políticas para su inclusión en el ámbito laboral.
La Casa de Carlota forma parte de la corta lista de elegidos, entre las que también figuran entidades como “NDDS”,“Barket Marion” o la “Environment agency”. Así como marcas multinacionales como Hilton, JP Morgan o Louis Vuitton.
«Nos dicen que somos el primer estudio que va a hablar de creatividad en la ONU y sin duda lo vamos a hacer desde un punto de vista diferente», explica José María Batalla, impulsor y fundador del estudio.
La jornada se centrará en los beneficios de emplear a personas con Síndrome de Down, tanto para estos empleados como para las propias empresas, y tendrá como fin poner en valor el mensaje de que las personas con esta discapacidad pueden aportar un valor añadido a la empresa si se cumplen las condiciones laborales adecuadas.
En sus cinco años de existencia, la Casa de Carlota ha desarrollado proyectos gráficos como las cajas rojas de Nestlé, las banderolas del Ayuntamiento de Barcelona, pósteres para Gallina Blanca o los carteles de la campaña “Mulla’t” por la esclerosis múltiple, además de packagings para las botellas de Solán de Cabras, los supermercados Veritas o los vinos y cavas Jaume Giró i Giró, entre otros.
El éxito del estudio ha llevado a sus fundadores a abrir una oficina en Medellín (Colombia) con el mismo modelo.
Según Batalla, el éxito de la fórmula «reside en la combinación de un equipo creativo en el que conviven tres talentos totalmente diferentes: cerebros experimentados de creativos, el talento de irreverentes y explosivos jóvenes estudiantes y mentes libres, extraordinarias, que huyen del pensamiento lógico tradicional y que han nacido con Síndrome de Down o autismo».
Batalla explica que «esta interacción de talentos tan diferentes y a la vez tan complementarios» les permite ofrecer a los clientes soluciones de diseño innovadoras, disruptivas, frescas y diferentes para sus productos y servicios. «Esto convierte el estudio en un referente de innovación creativa y social en el mundo», sostiene.
El proyecto de La Casa de Carlota nació como un proyecto unido a la agencia ‘1000friends’. La idea era combinar perfiles con capacidades distintas e integrar a personas con Síndrome de Down o autismo en procesos creativos ligados al ámbito de la publicidad.
El objetivo, explica Batalla, «ha sido demostrar con hechos tangibles que existe un talento en la discapacidad que por una serie de circunstancias y muchos prejuicios la sociedad no es capaz de imaginar».
Cinco años más tarde, La Casa de Carlota es conocida por haber creado un modelo de éxito sin precedentes que ofrece unos resultados únicos, y donde diferentes perfiles unen la expresión artística de sus mentes, componiendo un sólo equipo creativo.
La Casa de Carlota entiende que la creatividad surge de la singularidad en el pensamiento y la visión, y se conforma como un laboratorio de ideas artísticas centrado en dar alas al talento fuera de los límites de la ortodoxia artística tradicional. Según Josep María Batalla, «la chispa creativa que puede surgir de una persona que no tiene limitaciones ni prejuicios es única, y el resultado es espectacular».
El estudio ha sido galardonado con múltiples reconocimientos, no por tratarse de una organización que ayuda a la integración social, que también, sino sobre todo por el papel “activo” y “decisivo” de sus diseñadores con autismo o Síndrome de Down en el proceso creativo.
Según Batalla, «la idea central del proyecto es explicar que no estamos haciendo ninguna acción social desinteresada para personas con discapacidad, sino que se trata de un estudio de diseño totalmente profesionalizado y orientado a resultados».
Entre los principales premios se encuentra el Premio Europeo de Diseño 2017, el premio internacional Laus de diseño gráfico y comunicación audiovisual o el Premi Ciutat de Barcelona que otorga el ayuntamiento de la ciudad por su trabajo de innovación en el campo del diseño. Pero la empresa también ha recibido galardones por su impacto social. Ha sido escogida por Forética como una de las mejores iniciativas sociales del 2014 y ha sido seleccionada como empresa Incorpora (La Caixa) por su labor social.
Por último, cabe destacar que La Casa de Carlota cuenta con Barcelona Centre de Disseny como partner, con quien ha colaborado activamente en diferentes proyectos vinculados al diseño, como hacer la imagen creativa de la exposición ‘Krea’ en la Barcelona Designs Week de 2017, el acontecimiento más importante del sector del diseño en la ciudad. El estudio también forma parte del Clúster Diseño, una iniciativa impulsada por BCD Barcelona Centre de Disseny con el objetivo de posicionar Barcelona como polo de excelencia a nivel internacional en innovación a través del diseño.
Actualizado 17/07/2023