La guerra por dominar el mercado de los videos cortos está alcanzando su clímax en Estados Unidos, y Meta, la empresa matriz de Instagram, está lanzando un ataque frontal contra TikTok.
Tras la reciente prórroga de 75 días otorgada por el presidente Donald Trump para la posible eliminación de TikTok de las tiendas de aplicaciones en territorio estadounidense, Instagram está afinando su estrategia para aprovechar esta ventaja y consolidar su dominio.
Una de las primeras movidas de Instagram ha sido atraer a los creadores de contenido con incentivos económicos irresistibles. Según un informe de The Information, la plataforma está ofreciendo bonificaciones que oscilan entre $10,000 y $50,000 mensuales a aquellos creadores que publiquen exclusivamente en Reels antes que en cualquier otra red, incluida TikTok. Este enfoque busca no solo llenar el espacio que podría dejar TikTok si finalmente es eliminado del mercado estadounidense, sino también reforzar la lealtad de los creadores hacia Instagram.
Edits: la respuesta de Meta a CapCut
Instagram también está desarrollando una herramienta que podría cambiar el panorama de la creación de videos móviles: Edits. Diseñada para competir directamente con CapCut —la popular app de edición de video propiedad de ByteDance, matriz de TikTok—, Edits promete ser un “conjunto completo de herramientas creativas” dirigido a creadores que trabajan en dispositivos móviles.
El jefe de Instagram, Adam Mosseri, explicó que Edits incluirá funciones avanzadas como animación impulsada por IA, efectos de pantalla verde, superposiciones de video, subtítulos automáticos personalizables y herramientas para reducir el ruido de fondo. Además, permitirá guardar borradores, colaborar en proyectos y acceder a una pestaña dedicada para inspirarse en tendencias y audios populares.
“Las ediciones tendrán una gama mucho más amplia de herramientas creativas y una audiencia direccionable más específica”, comentó Mosseri. La intención es convertir a Instagram no solo en un lugar para compartir videos, sino también en un hub para la creación y el análisis del contenido.
La guerra tecnológica en contexto
Este movimiento se enmarca en un panorama político y comercial complejo. Durante la toma de posesión de Donald Trump, quedó claro que las grandes tecnológicas estadounidenses tienen la misión de bloquear el avance de TikTok y otras aplicaciones chinas en su territorio. Ya en 2020, el gobierno de Trump intentó prohibir TikTok, argumentando riesgos para la seguridad nacional. Aunque estas acciones no se concretaron del todo, la presión para limitar la presencia de tecnológicas extranjeras ha llevado a medidas como la eliminación de TikTok y CapCut de las tiendas de aplicaciones en Estados Unidos.
Mientras tanto, Meta ha visto una oportunidad para reforzar su dominio. Con TikTok fuera de escena, Instagram y sus herramientas como Reels y Edits podrían capturar una mayor cuota del mercado de videos cortos, atrayendo tanto a usuarios como a marcas que buscan plataformas alternativas.
¿El futuro de los videos cortos?
El desenlace de esta batalla podría redefinir el ecosistema digital. Por un lado, las políticas proteccionistas en Estados Unidos están creando un terreno más favorable para empresas como Meta, mientras que ByteDance enfrenta barreras que limitan su expansión en el mercado occidental. Por otro lado, los creadores de contenido deberán adaptarse a las nuevas condiciones, eligiendo cuidadosamente dónde invertir su tiempo y recursos.
Instagram parece decidido a tomar la delantera, aprovechando tanto las restricciones a TikTok como su propio ecosistema de creación. Sin embargo, queda por ver si estas estrategias serán suficientes para reemplazar a TikTok en el corazón de los usuarios.
La pregunta que queda es si esta competencia feroz beneficiará a los creadores y usuarios finales o si simplemente consolidará el poder de las grandes corporaciones tecnológicas en un mercado cada vez más concentrado.