El Ermitaño, de los Hermanos Díez junto a la producción de Pasozebra Producciones y la producción asociada de La Claqueta PC, ha sido nominado al Mejor Cortometraje de Animación para los próximos Premios Goya 2018.
Este arriesgado cortometraje posee un diseño de producción alejado de la animación más convencional y un planteamiento más dramático con una gran carga onírica y poética. Esta historia recuerda la búsqueda de la supervivencia y de cómo restablecer la comunicación tras la destrucción absoluta.
«Una historia profunda y universal que no deja indiferente al espectador», según señalan los artífices.
Los creadores valencianos afirman que El Ermitaño está lleno de influencias naturales. El cambio a los códigos orientales proviene por la fascinación por directores asiáticos y el teatro japonés, el Kabuki, así como otras corrientes experimentales. Los animadores Francisco Fernández Dapena (nominado a los Oscars por La Dama y la Muerte) y Raúl Díez contaron con la asesoría de la actriz Blanca del Barrio para ayudarles en lo referido al Kabuki.
La historia, que ha sido nominada al Goya, cuenta el fin de la humanidad, donde las guerras lo han destruido todo y surge el alma del planteamiento dramático. Ambientados en este contexto, el protagonista es un insecto que no ha terminado la metamorfosis con su parte humana. Se plantea un corto en que se juega con la interpretación y las poses, la asimetría en equilibrio y la búsqueda de un instante atemporal.
El guion ha sido uno de los aspectos más importantes del cortometraje, ya que querían mantener la historia, evitar condescendencias, virtuosismos y vicios de moda. Según nos explican, este equipo ha contado con algunos de los mejores profesionales españoles e internacionales para llevar a cabo esta animación digital.
Los hermanos Díez ya fueron nominados a los Premios Goya en 2003. Este año consiguieron alzarse con el premio al Mejor Corto de Animación con Sr. Trapo, siendo la primera compañía en obtener un Goya en sistema 3D, técnica que siguen desarrollando con Pasozebra Producciones, creada en 1997. Una compañía experimentada en el mundo de la animación, sobre todo atendiendo al stop-motion en largometrajes como Noche de Reyes de Sogecine.
Raúl y Daniel Díez llevan años vinculados a la producción de animación. Desde la ciudad de Valencia, son los precursores, junto Pablo Llorens, de un movimiento por la animación en stop motion. Esta corriente la utilizan para desarrollar largometrajes, series o publicidad, de donde ha surgido uno de sus personajes más transgresores como el Benito de Cuétara, consiguiendo el Premio Eficacia Oro Gran Consumo en 2005.