Imitar al líder del sector es una estrategia que muchas compañías apuestan por hacer en packaging, donde impactar en el consumidor es crucial. Este actitud, históricamente atribuida a las marcas blancas, ha cambiado radicalmente en los últimos tiempos, donde muchas empresas están demostrando que se puede abrazar una personalidad propia y tener éxito haciéndolo.
En el número 9 de la revista Gràffica Packaging, analizamos algunas marcas blancas que han defendido una firme vocación de diferenciarse del mercado y crear una identidad única para ellas. Apostar por una línea visual concreta que aglutine los valores de la compañía en cuestión se convierte en fundamental para destacar en el saturado panorama actual.
«MARKS & SPENCER
REINO UNIDO 2014
El supermercado Marks & Spencer es toda una institución en el Reino Unido, donde satisface las necesidades más básicas de moda, alimentación y decoración del hogar. Para su nueva gama de conservas de pescado, la empresa encargó a la diseñadora británica Sarah Hingston un packaging contemporáneo, fresco y con una impronta visual muy particular.
Con dos gamas diferentes, una de conservas básicas y otra gourmet, el packaging recoge ambos estilos, que conviven con fluidez y se diferencian, principalmente, por la elección del tipo de envase (de cristal en la gama alta). La colección, bastante amplia, identifica cada uno de los productos mediante un código de colores predominantemente claros, pasteles y suaves. Junto con una contundente tipografía de palo seco y unas atractivas y vintage ilustraciones que recuerdan a la famosa novela de Ernest Hemingway El viejo y el mar, estos productos demuestran que la marca blanca puede ser un espectro donde el diseño gráfico tiene mucho que decir.
[…]
MONOPRIX
FRANCIA 2010
Quién ha dicho que la vida diaria debe ser rutinaria? El packaging de los más de 2000 productos de consumo diario de Monoprix, la marca líder de supermercados premium en Francia, se opone por completo a esta premisa, y aboga por romper los estándares más clásicos del packaging que abunda en el lineal del supermercado.
En 2010, Monoprix quiso diferenciarse del resto de sus competidores y, para ello, encargó su restyling al estudio Havas City y, en particular, a la reconocida directora de arte Cléo Charuet. La idea de la también diseñadora gráfica fue…».
Puedes encontrar el artículo íntegro sobre las marcas blancas en el noveno número de la revista Gràffica Packaging. Si quieres la versión digital de la revista, la puedes conseguir en Android y iOs.