Después de ver Pina no hemos podido resistirnos en la redacción a compartir esta obra de arte y recomendar su visión como algo imprescindible. La perfección en la que se desarrolla todo es indescriptible. Concepto, ritmo, color, fotografía, luz, escenografía, coreografía, montaje, localizaciones, música… todo está cuidado hasta el extremo. En el ámbito estético, insuperable. Como nos comentaba uno de nuestros colaboradores, ‘deberíamos de diseñar así’…
No os queremos contar más, os dejamos unos vídeos para entrar en situación, pero si no habéis podido ir a verla, no esperéis a mañana ya que posiblemente esté fuera de cartelera.
Actualizado 13/10/2011