«El packaging es una de las disciplinas más completas del diseño», Albert Virgili

También puedes encontrar esta entrevista a Albert Virgili en étapes:

Albert Virgili Hill es un diseñador de Vilafranca del Penedés (Barcelona) que comenzó desde muy joven con el diseño de packaging de vino a raíz de diseñar propuestas para los productos de la empresa de su familia. Esto ha hecho que –actualmente– haya conseguido hacerse un hueco en el mundo del packaging de botellas de vino, cava, vermut y otros licores. Para conocer cómo ve el mundo del diseño de packaging hemos querido charlar con él.

Xitxarel·lo, Albert Virgili

Albert Virgili (1989) es un diseñador apasionado del packaging por lo completo que es. «Tiene algo de diseño de producto, algo de gráfico, algo de copywriting y requiere de mucho estudio previo». Con él, puede participar y estar presente en todas las partes del diseño; lo que muestra su gran afán de poder ser partícipe de ese control de su trabajo que también hizo que dejase los proyectos como freelance para elaborar sus propios productos. Tanto es así que él, junto a su equipo, se encargan tanto del diseño como de la definición del briefing que necesitan: «A veces salen de un hueco de mercado que detectamos. A veces salen de una noche de borrachera, o un juego de palabras. A partir de ahí desarrollamos el packaging, la comunicación y todo lo que el producto necesite».

Virgili es licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas por la Faucultat de Comunicació Blanquerna en Barcelona. Como la mayoría de recién licenciados, tras acabar la carrera estuvo unos meses como becario de copywriter en McCann-Erickson Barcelona. Lo que le marcó en cuanto al caminó que quería seguir. «El diseño siempre me había interesado, pero hasta entonces nunca me había planteado dedicarme a ello».

¿Por qué decidiste centrarte en el diseño de botellas de vino, cava, vermú, etc.?

Cuando estaba en McCann compaginaba mis prácticas con ayudar en la empresa familiar. Mi familia tiene una bodega en el Penedés, donde todos los veranos y festivos trabajaba para ganarme algunas perras, así que el mundo del vino no me viene de nuevo, llevo toda la vida mamándolo. Durante las prácticas realicé un restyling de una etiqueta de vino de nuestra bodega, y sin cambiar la botella ni el vino (sólo la etiqueta) las ventas se triplicaron en un solo año. Fue entonces cuando vi que podía ayudar a mi familia con el diseño y la creatividad.

Para mí el packaging es una de las disciplinas más completas del diseño. Tiene algo de diseño de producto, algo de gráfico, algo de copywriting y requiere de mucho estudio previo ya que sólo dispones de unos pocos centímetros cuadrados para comunicar.

Una de nuestras obsesiones es la de dar un segundo uso al packaging. 50Reasons & 30 Wishes es un buen ejemplo. Unos vinos con etiqueta serigrafiada que emulan un examen tipo test y que te dan 50 razones para beberte una botella de vino. ¿Pero es que se necesitan razones para beber vino?

30 Wishes & 50 Reasons, Albert Virgili

¿Qué importancia tiene el packaging actualmente? ¿Se demanda más o menos que antes? ¿Cómo se relaciona con otras disciplinas?

El packaging es y será fundamental. Creo que en España goza de una gran salud, y cada vez más empresas lo consideran más importante e influyente par el éxito de un producto. La demanda crece, ya que para muchas pymes es una inversión rentable. No todo el mundo puede permitirse esponsorizar festivales de música o hacer el anuncio del verano. Pero sí invertir 4 cifras en poner bonitas sus botellas.

¿Qué tendencias crees que existen actualmente en packaging?

La principal tendencia es la sostenibilidad. Otra es el humor, al menos para nosotros. Si no podemos enchufarle alguna risa a un proyecto, nos sentimos miserables.

¿Cómo se percibe lo ecológico ahora mismo en el mundo del packaging?

Ser ecológico es ahora mismo una opción, pero dentro de unos años será una obligación. Nosotros utilizamos materiales 100% reciclables, tintas ecológicas y cartón reciclado en la mayoría de los proyectos. A parte, existe algo ecológico en el mundo es el packaging reutilizable. Las botellas de Organic & Orgasmic son 100% reutilizables. Son growlewrs de 2L que la gente llena una y otra vez en nuestra tienda. El ahorro de recursos naturales y también económico es espectacular. ¡Reutiliza y vencerás!

¿Realizas algún tipo de rutina para buscar inspiración para tus trabajos?

Beber vino ayuda mucho. Consumir diseño también. Leo mucho diseño e intento estar al día de lo que pasa en el sector del vino. Otra fuente de inspiración clave es mi madre. Suele ser la primera persona a quién le cuento una idea. Si le gusta, ¡la probabilidad que termine siendo real es muy alta!

¿Cuál de tus trabajos ha sido el que más dolores de cabeza te ha dado a la hora de encontrar una solución al diseño del producto?

Probablemente fue Libalis, los vinos tropicales de Vintae. Estuve meses haciendo pruebas hasta que encontré la solución. La botella lleva un estampado tropical realizado por la marca de camisas Batabasta, impreso en papel con textura de lino que imita el tacto de una casmisa, y la etiquetas van perfumadas con aromas tropicales. Incluso hicimos camisas con el estampado de la etiqueta. Si ves alguien con este estampado por la calle, es probable que sea un comercial de Libalis.

¿Colaboras con otros creativos para tus trabajos? (ilustradores, tipógrafos…)

En 2014 lanzamos El Bandarra, nuestro vermut artesano. Este fue el primer proyecto con el que colaboré con otros profesionales del diseño. Realizé la parte conceptual y la dirección de arte, pero necesitaba el talento de una bestia del lettering como Ivan Castro para que el packaging saliera genial. Fue una gozada trabajar con él. El Bandarra es ahora mismo nuestro proyecto más ambicioso.

Vermut artesano El Bandarra, con lettering de Iván Castro

Pero colaboro con otros profesionales cada vez más. Primero, porque es mucho más divertido y segundo, porque los resultados son muy diferentes. También he colaborado con Alexis Rom en La Sueca, nuestra sangría vintage, con Batabasta para realizar Libalis, los vinos tropicales de Vintae, y con Tati Guimaraes para diseñar COM UN LLUM, un estuche de vinos que se convierte en luz de mesita de noche.

¿Has trabajado siempre como freelance?

En mis primeros años como diseñador hice de todo, desde la identidad de un Hotel, restaurantes, centros de fisioterapia y sobretodo vino. Mucho vino. Aunque mi punto de inflexión fue El Xitxarel·lo, nuestro buque insignia.

Fue el primer proyecto donde pude escoger la botella, el naming, el tipo de impresión de serigrafia, todo. Digamos que hacer el briefing y ejecutarlo yo mismo, no solo a nivel de packaging, sino también la comunicación, estrategia de venta, redes sociales etc.

Ganó dos Premios Laus, que está muy bien, pero lo más imporante: fue un hit en ventas y ayudó a mi familia a tener fe en el diseño y a apostar por él. El Xitxarel·lo salió al mercado con 3.000 botellas. Ahora mismo vendemos cerca de 100.000.  Fue entonces cuando dejé el mundo del diseñó freelance y me concentré en mis propios proyectos. Junto con mi hermano mellizo Alex, que lleva la parte comercial, nos hemos embarcado en varios proyectos, siempre relacionados con el vino.

Com Un Llum Lifestyle, con Tati Guimaraes

¿Qué aspectos positivos le ves a trabajar como freelance y a trabajar dentro de una organización?

Ser freelance me permitía trabajar en muchos campos fuera del vino. Tener mi propia empresa me permite no quedarme sólo en el packaging, sino ver el diseño de packaging como el punto de partida. Nosotros acompañamos el producto desde la coneptualización hasta su etapa de maduración en el mercado. Para mí el mejor ejemplo es El Xitxarel·lo: lleva 6 años en el mercado y sigue creciendo, y eso es gracias a la vida que le damos a través de las RRSS.

¿Qué consejos le darías a un/a diseñador/a que se plantea hacerse freelance?

Que se especialice. La especialización tiene cosas buenas y malas, pero realmente al principio es fundamental para hacerse un nombre. Aunque mi mayor consejo es hacer muchos proyectos propios. Es la mejor forma de reflejar las inquietudes y talentos de cada uno.

Tienda de vinos ecológicos La Festival

¿Tienes otros proyectos entre manos, además de los packaging que podemos ver en tu página web?

En 2015 fundamos La Festival, una tienda de vinos ecológicos en Gracia, Barcelona. Una aproximación al mundo del vino muy funky, con neones, diseño y comunicación atípica. Ahí nació Organic & Orgasmic, una marca super transgresora que defiende el vino a granel orgánico y orgásmico. En ella hacemos catas muy locas como el Wine Tinder: es como un Tinder, pero enológico y analógico. La gente viene a catar vinos y a ligar. Todo el mundo se lo pasa bien y más de uno termina la noche acompañado.

En 2016 fundamos Democratic Wines, un grupo de bodegas que persigue revolucionar y democratizar el mundo del vino. Con estética colorista y pop, Democratic se postula como la puerta de entrada al mundo del vino. Es nuestro proyecto más innovador y el que nos ha permitido ampliar horizontes. En ese momento es cuando nace Virgili Brothers, una boutique creativa donde trabajamos 5 personas para abastecer las necesidades creativas de nuestras 3 empresas: Casa Berger (El Xitxarel·lo etc) La Festival ( nuestra tienda de vinos) y Democratic Wines (El Bandarra, La Sueca, etc).

Solo trabajamos en proyectos donde somos socios, ya que para nosotros no basta con hacer un buen diseño de packaging, sino que se tiene que acompañar con todo. Un buen ejemplo es nuestro stand de Democratic Wines en la feria Alimentaria de hace 3 meses, una plaza colorista con una fuente de vermut en medio. Diseñado conjuntamente con el maravilloso Studio Animal de Barcelona. Servimos más de 5.000 vermuts. Fue una locura.

¿En qué estás trabajando ahora?

Ahora mismo estamos trabajando en un licor enfocado al mundo de la noche y que muy pronto verá la luz. Va a ser sin duda nuestro proyecto más punky.

→ Abert Virgili

     

Fotografia de catàleg

 

Salir de la versión móvil