Probablemente esa pequeña cámara web de tu ordenador está teniendo más uso este último año que en toda su historia, si es así, vamos a intentar mejorarla.
No hay marcha atrás, el teletrabajo ha llegado a nuestras vidas para quedarse. Parecía complicado pero hemos aprendido a ser productivos realizando tareas imposibles de acometer sin estar en nuestro puesto de trabajo. Por ello, te presentamos las mejores cámaras webs del mercado.
En estos días de incertidumbre el ordenador y el teléfono móvil están siendo nuestras principales herramientas, pero no podemos restarle importancia a uno de los accesorios estrella de la temporada: la cámara web.
Cruzamos los dedos para que la pandemia nos deje respirar y volvamos a poder elegir dónde trabajar, pero construir una oficina en casa nunca va a estar de más. Por eso en este artículo vamos a darle un buen repaso a las cámaras web, sus principales características y los modelos más destacados según sus funciones.
No tengáis duda, lo que parece un pequeño cambio en la oficina puede convertirse en algo muy importante. Una cámara web no solo nos va a ayudar a que las comunicaciones sean mejores, también va a conseguir que demos una mejor imagen de nosotros y de lo que hacemos.
Desconfía de la cámara que viene en tu equipo
Ok, está muy bien contar con una cámara web integrada en tu portátil o en tu ordenador “todo en uno”, pero en la gran mayoría de los casos nos ofrecen soluciones de muy baja calidad.
Están ahí para solucionarnos la papeleta en caso de que usemos la videollamada de forma esporádica, pero si realmente quieres mejorar la calidad de imagen tienes que apostar por una cámara dedicada.
Afortunadamente la oferta de cámaras webs es muy amplia, con precios realmente asequibles para modelos que cumplen bastante bien con su función, o productos premium con los que poder subir el nivel de las retransmisiones al máximo, siempre que tengamos un presupuesto holgado.
Características a tener en cuenta
Tranquilos, en este artículo vamos a encontrar un modelo ideal en cada escalón de precios. Pero antes vamos a darle un repaso a algunas características técnicas a tener en cuenta para elegir nuestro modelo ideal:
definición
Si estás familiarizado con el mundo informático sabrás que la definición a la vemos las cosas está directamente relacionada con la resolución, pues en el mundo de las cámaras web es un apartado muy importante y bastante descuidado en las opciones integradas en los equipos.
Lo habitual es encontrarnos con cámaras que trabajan en formato 720p, una cantidad decente pero que podemos potenciar bastante si subimos al siguiente escalón: 1080p. Nuestras conexiones a Internet pueden sin problemas con este cambio y la imagen será más acorde con las pantallas que actualmente estamos usando.
Existen modelos con capacidad de grabar en formato 4K, que tiene sentido para aquel profesional que quiera estar preparado para el futuro, pero no consideramos que sea al momento ideal ya que las principales herramientas tampoco le están dando un soporte muy importante.
fluidez
Casi tan importante como la resolución es lo fluido que podamos registrar la imagen, algo que nos aporta naturalidad a las transmisiones y claramente sube la calidad percibida por los demás. Obviamente en todo este proceso influye la velocidad de las redes de comunicación, pero así garantizamos la fluidez desde la fuente de grabación.
¿Cuál es la cifra ideal en una videollamada o streaming? Diríamos que nuestra cámara web no debe bajar de las 30 imágenes por segundo. Es la mínima especificación a buscar, pero lo ideal sería que encontramos un modelo que pueda doblar esta tasa (60fps).
óptica
Este tampoco es un asunto baladí y no solemos prestarle demasiada atención, ya que determina más que ninguna otra especificación cómo se van a ver las cosas. Lo que nos interesa conocer principalmente es el ángulo de visión de las mismas, que suele situarse en torno a los 90 grados.
Tendremos que subir el número de esos grados si nos gusta que la visión sea más amplia, para centrarnos en la imagen y que el fondo tenga interés, o si queremos que salgan más personas a la vez. Todo lo contrario si lo único que queremos es que nuestro busto sea protagonista.
Para intentar cubrir todas las opciones existen cámaras webs que cuentan con diferentes ángulos de visión. Al margen de la visión, también hay que tener la calidad de la óptica, que suele ir de la mano del precio que paguemos, pero un dato a tener en cuenta si nuestra iluminación es deficiente es la apertura de la lente: se mueve entre f/2,0 a f/2,8, cuanto más baja sea, mejor.
micrófono
Nos podemos volver locos con la calidad de imagen, pero si hay algo que no puede fallar en una transmisión es el sonido, ya que nos permitirá seguir con la comunicación aunque no lo podamos ver del todo bien.
Las cámaras webs cuentan todas con micrófono integrado, que va mejorando según el presupuesto, también van apareciendo tecnologías de mejora como la reducción de ruido. Como mínimo deberíamos apostar por un sistema estéreo de captación.
En el caso de que nuestras retransmisiones sean importantes en número de seguidores y queramos afinar con la calidad, apostamos por invertir en un micro externo.
enfoque
Si realmente queremos mejorar la cámara web, este es uno de los cambios más importantes. Las cámaras webs asequibles o integradas cuentan con un enfoque fijo que nos limita bastante en las intervenciones.
Una cámara web con enfoque automático nos permite movernos por la escena o acercar cosas para enseñarlas a la cámara, y siempre mantendrá bien definido lo importante.
iluminación
Podemos ver este apartado como una solución externa a la cámara web, por lo que invertir en una buena iluminación tendría poco que ver con el accesorio en sí, pero la realidad es que están apareciendo modelos que cuentan con su propio sistema para mejorar la imagen.
Si para nosotros es importante y no queremos invertir en las dos cosas, busca una de estas cámaras (os recomendaremos alguna a continuación).
Las mejores cámaras web
Vamos a repasar cómo está el mercado con una selección de cámaras web, con precios diferentes, también teniendo en cuenta especificaciones concretas y usos posibles que les podemos dar:
Microsoft LifeCam HD-3000, precio asequible
Vale, en puntos anteriores hemos descrito unas características técnicas superiores, pero queríamos comenzar esta lista con una cámara web asequible que realmente merezca la pena. Para eso confiamos en Microsoft, con un modelo como el LifeCam HD-3000.
Es una cámara que se queda en el formato 720p, con una proporción panorámica que le da al vídeo un look bastante cinemático. Está certificada por Skype, cuenta con reducción de ruido en su micrófono y su anclaje está diseñado para colocar en portátiles o monitores.
Logitech StreamCam, para los streamers
Nos ponemos serios para presentar un modelo con un diseño exquisito, por si te gusta que tus gadgets hablen sobre ti. Pero no es solo eso, es una cámara web ideada para los streamers, con la capacidad de hacerlo en formato 1080p a 60 imágenes por segundo.
La cámara puede girar con facilidad para registrar vídeos ideales para las historias de Instagram o Facebook. Destaca el enfoque y exposición automáticos basado en inteligencia artificial: rastrea los rostros.
Estamos ante un modelo que supera con holgura los 100 euros, pero merece la pena invertir en algo así para mejorar de forma significativa la imagen.
Lo tuyo es estar preparado para el futuro, puedes ya poder comunicarte en perfectas 4K, entonces Logitech tiene esta cámara web lista para conectar. Es posible llegar a 30 imágenes por segundo a esa resolución y tiene un modo ultra-suave de 90 imágenes por segundo para el formato 720p.
Cuenta con tres ángulos de visión diferentes (65, 78 o 90 grados) y puede realizar zoom en cinco aumentos por si te interesa recortar y quedarte con menos escenario. Cuenta con soporte HDR.
Es una cámara cara, pero ideal para profesionales de las retransmisiones.
Razer Kiyo, iluminación integrada
Muy inteligente la solución de Razer para aquellos que tienen problemas de iluminación en la sala y no quieren invertir en más accesorios. Lo podéis ver en la imagen, han colocado un anillo directamente en el frontal de la cámara web.
Por su calidad está diseñada para cualquier tipo de uso, pero viniendo de Razer es entendible que hayan apostado por funcionalidades relacionadas con el gaming. Su formato de grabación más alto es 1080p a 30 imágenes por segundo.
Logitech C920, la mejor para todos
No hay dudas, la opción ideal para presupuestos ajustados pero quieren la mejor calidad de imagen y sonido, con todo el buen hacer del líder del mercado. Puede grabar vídeo en formato 1080p a 30 imágenes por segundo y el campo de visión es de 78 grados.