Con la llegada de las redes sociales todos nos volvimos adictos a compartir cada una de las acciones que realizamos cada día. Y si hay algo que ha triunfado –además de las fotos haciendo footing, running (o como quieras llamarlo)– son las fotos de comida con el móvil.
A pesar de ser un tipo de fotografía –a priori– sencillo, las grandes páginas y cuentas que eclosionaron con esta moda como Tasty, Tastemade, BuzzFeed Food, etc. nos han demostrado el arte de fotografiar comida. En ocasiones no es tan sencillo hacer que tu comida, aunque esté muy buena, parezca realmente apetitosa para tu público de Instagram.
Si todavía no sois conscientes de lo que supone este tipo de fotografía en la comunidad de Instagram solo hace falta buscar los hashtags relacionados con este mundo: la etiqueta #food aparece en casi 300 millones de fotografías en la red social.
Y si nos vamos a platos más específicos, la pizza es la que triunfa en la red ya que su etiqueta #pizza cuenta con 27 millones de fotografías, a la que le sigue la ensalada con #salad y sus más de 14 millones de fotografías (porque nos gusta demostrar lo sanos y sanas que somos) y #pasta con casi 11 millones.
Toda esta tendencia ha llevado a usuarios a convertirse en verdaderos especialistas en la fotografía de comida como si de un producto para vender se tratara. Además, la edición de estas fotos es realmente cuidada para causar un mayor número de comentarios sobre la envidia que te tienen. Algunos de los pasos a seguir para triunfar en las redes con tus fotografías de comida son los siguientes:
- Buena composición: a la hora de encuadrar la fotografía de tu plato es importante que éste sea el centro de atención de la imagen, por lo que unas buenas composiciones son aquellas que cuentan con un plano cenital o en las que la poca profundidad de campo consiguen aislar el elemento principal.
- Variedad de colores: los colores vivos y variados son una muestra del buen estado de los alimentos. Por ello, en este tipo de fotografía puedes tomarte ciertas licencias con la saturación de los colores para que tu plato llame más la atención.
- Plato intacto: parece algo muy obvio, pero si al plato le falta alguno de los alimentos que lo conforman se va a notar en la composición y tu imagen va a perder interés.
Si aun así, no crees que tu comida sea la más apetecible de la mesa, siempre puedes optar por aplicaciones que cuentan con filtros específicos para este tipo de fotos como Foodie. Ésta cuenta con más de 30 filtros distintos cuyos nombres están relacionados con la temática: Yum, Positano, Tropical, Picnic, Sweet, Fresh, BBQ, Crispy y Chewy. Además se encarga de equilibrar los colores con un uso medido del flash que evitará que tus comidas adquieran colores amarillentos que las hagan poco apetecibles.
Actualizado 07/09/2017