Actualizado 21/04/2022
La historia de la fotografía es una muestra de la mejora a partir de ensayo y error. Desde 1820 han existido decenas de técnicas que iban superando a su antecesora en periodos cortos de tiempo. Sin embargo, durante el siglo XIX, solo hay una que llegó a establecerse y regularizarse durante años: el colodión húmedo.
El colodión húmedo es un procedimiento fotográfico creado en 1852 por Gustave Le Gray, el cual utilizaba un sulfato de protóxido de hierro para su revelado. El colodión es una solución de nitrocelulosa en una mezcla de éter y alcohol y fue descubierto por Louis Menard en 1846, algo parecido a un barniz.
Esta solución se debía verter sobre una placa de vidrio húmeda, donde se mezclaría al nitrato de plata con el que se sensibilizaba y revelaba la imagen. El hecho de que las placas tuviesen que estar húmedas para el revelado de la imagen obligaba a los fotógrafos a llevar un laboratorio en forma de carruaje para prepararlas antes de la toma.
A pesar de este inconveniente de tener que llevar el laboratorio a cuestas, el colodión húmedo supuso una gran mejora en la fotografía y contaba con varias ventajas sobre técnicas anteriores:
- La utilización de este procedimiento permitía una reducción muy notable en el tiempo de exposición, que pasaba de en torno a 15 minutos del cianotipo – técnica utilizada hasta el momento – a apenas unos segundos con el colodión húmedo.
- Esta reducción de tiempo, también conllevaba una disminución de costes. Hecho que favoreció a la regularización de la fotografía.
- La estabilidad de la emulsión entre colodión y nitrato de plata era mucho mayor que las anteriormente utilizadas, lo que daba una mayor seguridad y tranquilidad a los fotógrafos.
- Con su regularización se abandonaron técnicas anteriores como el daguerrotipo, la cual no permitía realizar copias a partir de un negativo.
- También supuso la popularización del acceso al mercado de imágenes de famosos por parte de la burguesía y las escasas clases medias.
Con su estandarización en 1855, varios fotógrafos tomaron este procedimiento como única forma de trabajo. Algunos de los más importantes en España durante esta época serían Charles Clifford y J. Laurent. A nivel internacional, Anthony Berger también utilizaría esta técnica en imágenes tan icónicas como los retratos de Abraham Lincoln.
En la década de 1880, su uso empezó a ser desplazado por la aparición de la instantánea fotográfica, de las placas secas de vidrio al gelatino-bromuro como las novedosas cámaras Kodak. Pero las placas de vidrio al colodión siguieron empleándose muchas décadas en los talleres de artes gráficas.

Muchas gracias por compartir esta información, tan valiosa y relevante. Saludos desde México.
muchas gracias por su trabajo.
Muchas gracias por este artículo. Me parece muy interesante. Un saludo.