La READ acaba de pronunciarse respecto a la convocatoria del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte en la que se lanza al mercado de saldos del diseño (no es exactamente un concurso al uso, sino una especie de subasta en la que gana el mejor ‘postor’) para definir la nueva imagen del INAEM. El comunicado es el siguiente:
«La Red Española de Asociaciones de Diseño Gráfico, Interior y Producto, READ, es una entidad de ámbito estatal que agrupa a algunas de las más importantes asociaciones de diseño españolas: Asociación Andaluza de Diseñadores (AAD), Asociación de Diseñadores de la Comunidad Valenciana (ADCV), Asociación de Diseñadores de Madrid (DIMAD), Asociación de Profesionales del Diseño y Comunicación Publicitaria de la Región de Murcia (DIP) y Asociación de Diseñadores Industriales de Euskadi (EIDE).
Desde READ queremos manifestar nuestra preocupación por la manera en que se está llevando a cabo el proceso de encargo de servicios profesionales de diseño mediante la convocatoria de concursos especulativos, y en concreto este concurso, por el cual expresamos nuestro profundo malestar debido al daño que está ocasionando a la comunidad de diseñadores.
Desde la experiencia profesional, las asociaciones de diseñadores pensamos que estas prácticas incorrectas no benefician el resultado de dichos concursos y con ello, la imagen del convocante. Y es precisamente tarea de las asociaciones profesionales fomentar la colaboración con las instituciones públicas, las empresas y otras organizaciones para estimular y canalizar el uso del buen diseño en todas las actividades sociales, culturales y económicas en que éste pueda intervenir a través de encargos en todas sus modalidades. Entendemos que la forma en que se eligen y desarrollan unas u otras fórmulas, condiciona directamente los resultados finales. En este sentido, el procedimiento elegido en este caso no augura el mejor resultado.
Un encargo como el que nos ocupa, debe ir acompañado de un proceso intachable. Máxime cuando el convocante es una institución pública de la máxima importancia como es un Ministerio.
Es necesario, y desde la READ nos comprometemos a ello, impulsar y difundir unas normas elementales para evitar el trabajo especulativo en el sector del diseño, que no de lugar a malas prácticas que a nadie benefician. Consideramos que toda solicitud de encargo profesional para diseñadores debe tener como punto de partida las recomendaciones realizadas por organismos internacionales como Icograda (Consejo Internacional de Asociación de Diseño Gráfico) / ICSID (Consejo Internacional de Sociedades de Diseño Industrial) / IFI (Federación Internacional de Arquitectos / Diseñadores de Interior).
A modo de resumen, para que un encargo de diseño en la modalidad de concurso no se considere especulativo y su resultado sea satisfactorio, debe cumplir, entre otros, los siguientes requisitos:
– Contar con un jurado público y cualificado con proporción significativa de diseñadores profesionales.
– Cuidar por igual un doble objetivo: garantizar el resultado final del concurso y preservar el carácter igualitario para todos los participantes.
– Garantizar el respeto y la protección a la propiedad intelectual de los participantes.
– Cuidar que la remuneración, para participantes y vencedores, siga las recomendaciones específicas de los organismos internacionales antes citados.
Estas consideraciones realizadas, ponen de manifiesto que el planteamiento del concurso que nos ocupa no se ajusta a las recomendaciones generales que los profesionales del diseño entendemos como imprescindibles para estas convocatorias por las siguientes razones:
– El proceso de selección se genera a partir de los envíos de trabajos realizados de forma gratuita por todos aquellos participantes que se presenten.
– Se otorga un única remuneración muy por debajo de un precio acorde al mercado real, lo cual desprofesionaliza completamente el proceso.
– No se hace mención específica de los miembros del jurado y sus cargos.
– El proceso no garantiza el resultado final del concurso.
– Las bases de este concurso atentan contra los derechos de propiedad intelectual de los participantes. Es contrario a la ley e inaceptable que la mera participación suponga la cesión de los derechos de todo el material presentado, no sólo del trabajo ganador sino también el de todos los participantes.
Por tanto, pedimos la retirada de dicho concurso y, para futuras iniciativas, un mayor cuidado y atención. Si se precisara una nueva convocatoria, rogamos que se utilicen otros procedimientos más respetuosos para los convocados y para el convocante.
Es importante entender que las normas internacionales que regulan la buena ejecución de los encargos profesionales de diseño, no sólo velan por la dignidad profesional de los diseñadores, sino también por el beneficio de la entidad convocante.
Desde READ nos comprometemos a avanzar en este sentido. Resolver el diseño de hoy no puede hacernos olvidar el diseño de mañana».
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