Vivimos en una sociedad digital donde la información fluye de forma constante y la inmediatez reina en cualquier tipo de actividad. Esto ha creado un panorama donde la necesidad de producir creatividad, que dé soluciones en muy poco tiempo, es constante. Todo un reto para muchas marcas y un gran desafío para los diseñadores, quienes deberán estar preparados si quieren superarlo.
Visto el estudio realizado por la John M. Olin School of Business en la Universidad de Washington –en el que el 40% de las empresas que encabezan los rankings de Fortune 500 y S&P 500, dentro de diez años ya no existirán– es evidente que la creatividad es una gran aliada para asegurar la supervivencia de las grandes marcas. Las empresas deben reinventarse incluyendo la creatividad para ser más competitivas. De hecho, así describe la importancia del diseño dentro del engranaje de una empresa John Maeda, diseñador y socio de Kleiner Perkins Caufield & Byers:
«Las organizaciones más importantes son líderes en diseño. Las que no están dispuestas a invertir en diseño pensando que no es mesurable o que no suponen un retorno de inversión tangible, se quedarán atrás […] Las empresas que se han centrado en el ‘más, mejor y más rápido’, ahora necesitan ajustar su filosofía incluyendo el diseño como un valor diferenciador clave».
Ante este escenario en el que es fundamental que la creatividad se aplique en el menor tiempo posible, ahora solo cabe preguntarse qué puede hacer el diseñador para estar a la altura de las nuevas e inmediatas soluciones que exigen las marcas. La tecnología en este aspecto puede ser la mejor amiga del diseñador. ¿Y si con ella se consiguiera reducir los tiempos de procesos de creación al máximo, haciendo además que se logren resultados extraordinarios? Sería perfecto.
Un buen ejemplo de ello es esta campaña realizada por el estudio Abby Priest, en que en tan solo dos semanas pasaron de tener una idea interesante a tener una campaña de lo más sorprendente. ¡Dos semanas!
Aunque parezca complicado ajustarse a unos deadlines cada vez más estresantes, sin que afecte a la calidad del proyecto, es posible y cada vez más fácil si dispones de las herramientas adecuadas que permitan acortar tiempos para crear hasta los proyectos globales más completos. Esto puede lograrse, por ejemplo, si se trabaja en un mismo entorno como puede hacerse con Creative Cloud (en el que, en un mismo sitio, se puede desde hacer esbozos en cualquier dispositivo móvil con Photoshop Sketch, capturar al momento colores que inspiran con Capture CC, acceder a imágenes de calidad sin salir de Photoshop –presentándoselas al cliente y pudiéndolas comprar en un click si finalmente cuentan con su aprobación–, etc., hasta gestionar cualquier tipo de archivo desde la biblioteca).
Dominar esta tecnología y este proceso de trabajo supone una clara ventaja profesional para el creativo. Si quieres descubrir cómo hacerlo, te recomendamos que sigas los Creative Days de Adobe. Y si quieres aprender los trucos y las técnicas que usan los estudios creativos internacionales, no puedes perderte la primera European Creative Jam Online que se celebrará en Bilbao el próximo 6 de mayo de 2016 (a las 12 h) y que podrás seguir por streaming. Una gran oportunidad para aprender workflows de la mano de siete estudios (entre ellos Tatabi Studio representando a España) quienes ofrecerán sus mejores consejos –fruto de su experiencia– y con quienes podrás interactuar formando parte de una experiencia única y emocionante.
Despertar y ser conscientes de que el ritmo y las necesidades del público cambian y evolucionan será la clave para adaptarse y no quedarse atrás en el negocio de la creación visual.
