Los directores estadounidenses Sarah Friedland, Tracie Laymon, Carson Lund y Tyler Taormina, que presentan sus últimos trabajos en Seminci, han participado en una conversación titulada ‘Buscando una América verdadera’.
La Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) acrecienta en esta 69ª edición su apuesta por el nuevo cine americano independiente, tanto en sus secciones competitivas como a través de la retrospectiva dedicada a Nathan Silver. Entre las actividades incluidas en ‘Pensar el cine’, cuatro de los realizadores que han acudido a Valladolid a presentar sus películas, Sarah Friedland (Familiar Touch), Tracie Laymon (Bob Trevino Likes It), Tyler Taormina, (Christmas Eve in Miller’s Point) y Carson Lund (Eephus) han compartido sus puntos de vista y experiencias en una mesa redonda titulada ‘Buscando una América verdadera. Cine indie estadounidense contemporáneo’, moderada por el director brasileño Gabe Klinger, y reivindicado un cine, situado en los márgenes de Hollywood, que refleja la vida de las personas reales.
Para entender lo que significa el cine independiente en Estados Unidos, hay que distinguir entre el modelo de financiación habitual en Europa, en el que es frecuente la presencia de dinero público, con lo que se vive en Estados Unidos, cuyos fondos suelen provenir de individuos y empresas privadas. Por ello, Tyler Taormina ha reconocido su desencanto con el modelo de producción de Hollywood: «Después del estreno de mi primera película, me encontré en una posición en la que trabajando con productores de Hollywood que habían hecho todas esas grandes películas, pero que el dinero prometido desaparecía a la hora de la verdad. Me di cuenta de que eso es lo que hacen; te hacen perder la vida y el tiempo. Llegó un punto en el que pensé que, si hacíamos una película con ellos, no creo que me fuera a sentir muy bien al respecto».
Una sensación que comparte Carson Lund, que también ha trabajado como director de fotografía para Taormina en Christmas Eve in Miller’s Point: «Realmente, si estáis pensando en qué tenemos todos nosotros en común, es la lucha constante contra la maquinaria industrial que nos vemos obligados a mantener».
Reflejar en el cine una América real
Los cuatro realizadores han reflexionado sobre la situación del tipo de cine americano al que todos pertenecen, situado en los márgenes y alejado de las dinámicas de Hollywood, haciendo hincapié en el retrato de una América real, la de los suburbios, los trabajadores y aquellos relatos que no se representan con frecuencia en el cine de gran presupuesto. Sarah Friedland, cuya película, Familiar Touch, parte de su propia experiencia como cuidadora de ancianos con demencia ha señalado: «La vida cotidiana de los residentes con los que trabajé me pareció muy distante de cómo se representa el envejecimiento en el cine, al menos, en el cine estadounidense. Creo que hay películas sobre la vejez realmente maravillosas fuera de Estados Unidos, pero todavía no he visto una película estadounidense que realmente me encante sobre un personaje anciano».
En relación con esto, Tracie Laymon ha expresado: «Creo que muchas películas que me gustan son bastante oscuras y siento que estamos en una época triste en Estados Unidos, por lo que necesitaba hacer algo sincero y algo que nos conectara en lugar de dividirnos. Bob Trevino Likes It está dedicada a un amigo mío que falleció, y creo que tener corazón a la hora de producir cine es imprescindible».
En paralelo, Carson Lund ha reflexionado sobre la relación del cine con el béisbol, y cómo ambos parecen elementos de la cultura americana del pasado, a los que se ha dado por muertos en varias ocasiones: «Cuando me mudé a Los Ángeles a estudiar cine dejé de jugar al béisbol, pero unos años más tarde me apunté a una liga amateur para adultos. Y me di cuenta de que cuando juegas como adulto no existe esta presión competitiva, se trata más de compartir tiempo con personas con ideas afines que tienen la misma pasión por algo, y es lo que quise retratar en mi película Eephus». Sobre la posición política de retratar el tiempo de los americanos ha añadido: «Creo que el béisbol, específicamente más que cualquier otro deporte importante en Estados Unidos, puede ser una especie de refugio del estrés de ganarse la vida en América».
Los cuatro coinciden también en su forma trabajar con el elenco, tratando de crear un grupo y unas relaciones que van más allá de la película. Sarah Friedland organizó talleres previos con los ancianos para explicarles el funcionamiento de un rodaje, algo que permitió que se integrasen de una manera profunda en el proyecto. Tracie Layman, por su parte, se ha referido a su proceso de trabajo con el equipo de la misma manera, como una especie de pequeña familia. De un modo similar, Carson Lund convocó a todos los participantes de su película antes del rodaje para que pudiesen pasar unos días juntos y crear vínculos reales que se viesen reflejados en la película. En concepción de su película, Tyler Taormina ha asegurado asimismo que no podía ser de un único personaje, sino que tenía que dar importancia al grupo, de forma más colectiva.
Además de los títulos mencionados, se proyectarán en esta edición de Seminci las películas Blue Sun Palace, de Constance Tsang y A Real Pain, de Jesse Eisenberg, en la sección Punto de Encuentro; así como Invention, de Courtney Stephens, en Alquimias.