Algunos trabajadores de Antaruxa, el estudio que ha animado el largometraje ganador del premio Goya 2021, señalan que no aparecen en los títulos de crédito con el rol que desempeñaron.
El premio Goya al mejor largometraje de animación de 2021 ha recaído en Valentina, la historia de una niña con síndrome de Down que sueña con ser trapecista.
En una nota de prensa firmada por Raquel Rodríguez López, montadora y layout artist del largometraje, como representante de un grupo mayor de trabajadores de Antaruxa, se expone el «profundo malestar, repulsa e incredulidad» que les generan las declaraciones que ha realizado Chelo Loureiro con respecto a la obra.
¿quién dirige un film de animación?
En el comunicado Rodríguez especifica que Loureiro «se ha atribuido una dirección cinematográfica que no ha realizado». En un tweet desde su cuenta personal, la propia Rodríguez señala que los directores del largometraje fueron ella misma, Brandán Álvarez (quien figura como director de animación en el dossier de prensa de la película, no así en la página web ni en el cartel del largometraje), Raquel Ramos y Sandra Varela.
En marzo de 2020 el estudio de animación con sede en Coruña anunciaba la coproducción de Valentina, el que sería su primer largo de dibujos animados. Y que lo haría en colaboración con Abano y su productora ejecutiva, Chelo Loureiro.
Por entonces la película se encontraba en fase de producción y Brandán Álvarez, fundador y responsable de la empresa, aseguraba que ya había 15 trabajadores de Antaruxa participando en su elaboración, «pero alcanzarán los 30 en la fase culmen de animación», aseguraba.
También se acusa a la guionista en la nota de prensa de haber «modificado los títulos de crédito de forma que no se corresponden con la realidad».
los títulos de crédito
Entre otras cosas, critican que Loureiro «ha modificado los títulos de crédito de forma que no se corresponden con la realidad» y que a pesar de «estar advertida», procedió a realizar cambios que conocieron una vez que la película estaba estrenada.
Según explica Raquel Rodríguez «hacia el final de la producción, mandamos un documento completo a Chelo Loureiro con los departamentos integrantes definitivos. Documento que, deducimos, Chelo Loureiro ignoró y sin avisar y/o consultar con sus propios trabajadores, cambió a placer».
impagos y beneficio personal
En dos puntos más, el comunicado indica que «existen impagos a varios trabajadores», «algo difícilmente justificable cuando la película ya ha sido estrenada en cines», añaden.
Y por último, se denuncia un «uso personal e interesado de la comunicación pública».