El pasado 21 de septiembre se presentó el tráiler de la nueva obra del cineasta norteamericano Wes Anderson, Isle of Dogs. Una obra que está realizada en stop motion; un formato al que vuelve el director tras nueve años desde que dirigió Fantastic Mr Fox.
Isle of Dogs cuenta la historia de Atari Kobayashi. Un niño de 12 años que ha decidido volar hasta la isla donde han sido concentrados todos los perros de la ciudad a causa de un extraño brote de gripe canina que amenaza la salud pública y puede llegar a provocar una peligrosa epidemia. Este acto de valentía se debe a que el niño quiere rescatar de aquella isla a su perro Spots, lo que no gustará a los altos poderes de la ciudad.
Wes Anderson es uno de esos directores con una estética muy cuidada y característica que hace que distingas con el primer fotograma si una película es suya o no. Este estilo del director está muy resaltado, incluso, en esta película, a pesar de haberse realizado en stop motion. La estética de este director va más allá de la temática de la obra, no importa si es el Gran Hotel Budapest o si es Isle of Dogs, siempre se va a reconocer su trabajo con un simple fotograma.
Esta estética tan característica reside en la composición; una muy simétrica en la que el elemento que quiere destacar el director se encuentra siempre en el centro, y el resto del encuadre está equilibrado, por lo que no permite que ese centro de atención se desvíe.
Por último, Isle of Dogs es una muestra más de los grandes proyectos en los que se embarca este director. A pesar de ser una producción japonesa, el doblaje traducido al inglés contará con las interpretaciones de actores de la altura de Edward Norton, Bryan Cranston, Bill Murray, Scarlett Johansson o Harvey Keitel.