Everything es el videojuego que ha roto los esquemas de los Oscars al convertir su tráiler promocional en uno de los competidores de estos prestigiosos premios. Por primera vez en la historia de los Oscars, un videojuego se encuentra entre las filas de los posibles premiados.
Esta creación de David OReilly competirá en la próxima gala de los Oscars en la categoría de Mejor Corto de Animación, tras haber recibido el premio del jurado en la categoría de Animación en el Vienna Shorts Festival. Everything, que fue lanzado a principios de año, ha logrado grandes reconocimientos gracias a su particular estética.
Everything es un simulador del mundo en el que el usuario puede meterse en la piel de todo tipo de seres y objetos existentes en la vida real. Este videojuego permite a los jugadores recorrer el mundo desde las distintas perspectivas de los seres y elementos existentes: se puede ser desde un microorganismo hasta un oso, pasando por una galaxia, una isla, un globo aerostático o una flor silvestre.
El videojuego se concibe como un simulador filosófico al recorrer en primera persona el mundo al compás de la voz del filósofo Adam Watts, aspecto que también destacan en la página de Vienna Shorts Festival.
«El juego es como una película que, más allá de ser entretenida, tiene un potente tema poético y filosófico que sirve a un propósito altamente educativo. Incluyendo una potente declaración política, que anima al jugador a dejar que su ego se disuelva y adquiera una nueva perspectiva del mundo», alegan.
El trabajo de OReilly destaca por su rompedora dinámica que permite a los usuarios del videojuego experimentar con las diversas formas de existir y las distintas percepciones del mundo. Un trabajo que ha transgredido los límites de los videojuegos y que, no cabe duda, ya ha marcado un antes y un después en la historia de los Oscars.
