Binomi Creatividad se ha tomado con mucho humor la diatriba habitual entre cliente y diseñador. Un discurso que han plasmado en El Juego de la Campaña Loca, un juego de tablero ingenioso y con un diseño muy cuidado en el que, casilla a casilla, todo diseñador puede verse reflejado.
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La intromisión gratuita, el retoque continuo de piezas por parte del cliente, un gran carrusel de contratiempos… ¿A alguien le suena esto? Todo aquel que trabaje en el área del diseño y la creatividad sabrá de qué hablamos. Esas situaciones entorpecen día tras día el óptimo desarrollo de nuestra labor. En Binomi Creatividad lo saben bien, lo han sufrido en sus ‘carnes’, pero antes de rasgarse las vestiduras han querido verlo de una forma más divertida. Y así han creado El Juego de la Campaña Loca, un juego de tablero que redefine el clásico Juego de la Oca readaptando las casillas a las situaciones de la vida real en una agencia o estudio de diseño.
El Juego de la Campaña Loca tiene un diseño vintage con una gráfica está muy cuidada. «Muy en la línea retro que demanda el artículo», nos explican Juan Franco y Armand Monge de Binomi Creatividad, «y con el evidente propósito de mostrar nuestra capacidad para plasmar cualquier producto de una forma atractiva y diferenciadora».
El juego incluye todas las dificultades para avanzar, retrocediendo aquí, frenándote allá, y, sobre todo, «encomendándote siempre a la suerte para poder continuar hacia delante». Su mecanismo es muy sencillo. Las fichas representan a los esforzados creativos que intentan progresar a lo largo de una campaña y las casillas del tablero reflejan las principales trabas y escollos que van apareciendo, desde el esperanzador inicio del proyecto hasta su ansiada publicación.
«Una motivación fundamental para ilusionarnos con esta idea ha sido poder denunciar y contrarrestar la ausencia de humildad de algunos clientes, incapaces de reconocer que son ellos el principal obstáculo para que prospere su proyecto», dicen. «Un caso paradigmático es el anunciante que, después de desarrollar, trabajar y casi entregar sus encargos, se da cuenta de que no hay presupuesto para tirarlo adelante. Obviamente, éste se ha ganado la popular casilla de la Muerte.
Dicho esto, Juan Franco y Armand Monge también matizan: «Por supuesto, no todos los clientes son iguales pero, creemos, de corazón, que toda esa falta de criterio y de respeto, esas injerencias absurdas y de dudoso gusto, esos veleidosos cambios de última hora, esas muestras de gratitud que brillan por su ausencia…, bien merecen este afectuoso correctivo».
En conclusión, El Juego de la Campaña Loca es una idea original, desenfadada y atrevida, en coherencia con nuestro posicionamiento más alternativo y fuera de lo convencional, y que, al tratarse de un juego educativo, pueda incluso resultar muy didáctico para todos. De hecho, lo han concebido como obsequio corporativo, «tal vez para regalárselo en plan irónico a los clientes que nos soliciten muchos cambios».
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+info: binomi.es
Actualizado 14/03/2014