David López: «Antes de que el mercado me acabase dando la patada, me fui yo»

David López es uno de nuestros autores más internacionales. Ha publicado con las grandes editoriales de cómic Marvel y DC pero, como cada vez más creadores, apuesta por su propia obra. Blackhand y Ironhead es su propuesta más personal. Portada Blachand & Ironhead David López ¿Qué es Blackhand y Ironhead? Es la historia de una superheroína y una supervillana. Las dos se conocen en el funeral del mayor superhéroe del mundo y allí descubren que son hermanas. A partir del momento en el que se encuentran tienen que reexaminar todo lo que conocen porque se dan cuenta de que están rodeadas de mentiras. En el primer tomo rompen con este mundo y en el segundo tomo pagan las consecuencias de hacerlo. Hay una sociedad que sufre la corrupción de su padre y ellas deciden acabar con ello y los poderes fácticos se lo hacen pagar. Es un cómic que empecé a publicar en formato digital en Panel Syndicate, una plataforma online que tiene por filosofía que es el lector quien elige cuánto pagar por la descarga de sus cómics, o si lo quiere gratis, todo el beneficio de la descarga va directamente a los autores. Me parece que genera una relación muy bonita con el lector porque lo convierte en tu cómplice. A los lectores del digital los siento como mecenas. Panel Syndicate nace de la voluntad de Marcos Martín y Brian K. Vaughan que, siguiendo el modelo de In Rainbows de Radiohead quieren llegar directamente al lector. Son autores, como tú mismo, que están trabajando habitualmente para las grandes editoriales de cómic y hacen una apuesta personal que iguala y supera los parámetros de calidad que éstas exigen. Así es, recibes del público en función de lo que entregas, te lo juegas todo, así que no puedes bajar la calidad ni un ápice. El autor aprovecha al máximo el formato horizontal de la obra En la serie hay dos temas fundamentales: las relaciones familiares y la construcción de los mitos. Sobre todo en el primer tomo lo que he querido es hablar de cómo construimos nuestra noción de la realidad. Si lo que nos cuentan son mentiras, te acabas encontrando con una sociedad que no funciona. El segundo tomo habla de las consecuencias de tus propios actos. Cada personaje toma decisiones y tiene que asumir lo que vendrá después. «El segundo tomo habla de las consecuencias de tus propios actos» Las protagonistas son dos personajes femeninos fuertes que rompen con los roles habituales en los cómics del género. Sí, aunque poco a poco es más habitual que sea así. Son personajes imperfectos. Estoy reflexionando aún sobre lo que he hecho pero creo que es una de las bazas de la serie, no cumplen las expectativas depositadas en ellas. Diseño de personaje de Blackhand Alexia no cabe en la talla que le han preparado e intenta formar parte de un status quo que su familia defiende y protege. Después vemos que esa perfección que le intentan inculcar no lo es tanto. Lo del traje es una metáfora simple pero me sirve, el traje que le han preparado no le gusta y le queda pequeño. Cuando decide no usar ese traje es cuando empieza su camino del héroe, es como «el camino del ninja» que elige Naruto. Es un viaje que estoy haciendo con ella, yo creé un personaje y después ha ido evolucionando y se ha acabado imponiendo. Diseño de personaje de Ironhead Es una vuelta a los orígenes. En tus comienzos en España eras autor completo hasta que empiezas a trabajar en Estados Unidos para Marvel y DC como dibujante. Con Blackhand y Ironhead recuperas la autoría completa aportando todo lo aprendido en este mercado. Eso es. Me pongo a hacer cómics de superhéroes como dibujante porque siempre me han gustado. Mis primeros cómics los hice como autor completo, tanto el guion como el dibujo. Haciéndolos descubro que me gusta contar mis historias pero cuando surge la posibilidad de ser únicamente dibujante en el mercado americano no tengo dudas, es algo que me permite vivir bien de mi trabajo. Podía trabajar como diseñador por un salario mínimo o cobrar mucho mejor como dibujante. «Podía trabajar como diseñador por un salario mínimo o cobrar mucho mejor como dibujante» Después de quince años dibujando para otros me planteo volver a mis propias historias pero me doy cuenta de que hay que enfrentarse a ellas de otro modo. Cuando David Rubín publica El héroe vi que se podía hacer lo que a mi me gustaría: algo claramente comercial pero a la vez muy personal y con recursos gráficos propios. Llevaba mucho tiempo con el gusanillo, pero no encontraba la manera, justo entonces empezó el proyecto de Panel Syndicate me tiré a la piscina, era EL momento. La vida del dibujante de superhéroes es limitada. Hay autores que publican veinte años y después no vuelves a saber de ellos. Es muy cansado y muy frustrante así que antes de que el mercado me acabase dando la patada, me fui yo. Rediseño del look de las protagonistas ¿Compaginas tu trabajo personal con otros encargos? Sí, pero hay algo muy frustrante en las grandes compañías. He trabajado en Catwoman, Capitana Marvel, Lobezna durante años y no he generado ningún derecho, ni moral ni económico. Lo que necesitas es que tu obra te mantenga a ti, igual que si fueses un escritor que poco a poco van haciendo su catálogo y cobrando sus royalties. «He trabajado en Catwoman, Capitana Marvel, Lobezna durante años y no he generado ningún derecho, ni moral ni económico.» Es un camino que siguen muchos grandes autores que tocan techo en las dos grandes compañías y realizan obra independiente que les permite ser dueños de su obra e incluso llevarla a otros espacios como el cine o la televisión. Esa es la puntilla. Las grandes multinacionales se benefician del trabajo de los autores y no recibimos ningún respeto. Hace poco Brian Hitch, creador de The authority, contaba que se acababa de enterar de que van a hacer una película sobre su obra y ni le habían llamado para decírselo. Lo que para ti son obras en las que vuelcas tu alma, para las corporaciones son como cromos que pueden usar como quieran. López logra trasladar sus preocupaciones dentro de los parámetros de una obra de acción. Recientemente ha fallecido Carlos Pacheco, punta de lanza de los autores españoles en el mercado americano. En las últimas décadas el paradigma ha cambiado totalmente. Carlos era el cable transatlántico. Abrió el camino para ser una superestrella. En América vieron que en España había grandes dibujantes y vieron que se podían aprovechar. Digo que se podían aprovechar porque con los precios que pagan actualmente, no se puede vivir en Norteamérica pero en España sí que da para vivir. Para vivir como un albañil pero sentado, tampoco es una locura. Estudio de los decarados de la obra. ¿Trabajando los siete días? No. A medida que me hago mayor no quiero hacerlo. Cada vez miro más la postura al trabajar, el descanso y me voy dando cuenta de que la producción es la misma pero la calidad de vida es mejor. A la larga, es mejor descansar el fin de semana. Además, cuando me preparo el calendario para afrontar un trabajo me reservo algún día de descanso, bien para solventar asuntos personales o porque veo que hay días en los que es imposible trabajar, no sale y ya está, me olvido del trabajar, me doy una vuelta, me tomo un café y mañana será otro día. Funciona muy bien. «Cada vez miro más la postura al trabajar, el descanso y me voy dando cuenta de que la producción es la misma pero la calidad de vida es mejor.» La ergonomía en el trabajo es uno de los temas recurrentes en los streamings de dibujantes que hacéis en el que ponéis en común vuestras experiencias y cotidianidades como trabajadores del tebeo. Hay una fetichización del arte. Una imagen bohemia que no se corresponde a la realidad. Somos trabajadores, más cercanos a los linotipistas del XIX que a Van Gogh. El día a día es el que es. Quitando los que tenemos la suerte de trabajar en el extranjero, los dibujantes somos trabajadores pobres. Hay una gran precariedad. « la gente entiende que el arte construye la sociedad y nos permite definirnos como pueblo.» Te suben la cotización de autónomos y estás jodido. Pasa en España pero en otros países que he visitado como Italia o Francia, es distinto. Pagan mejor y la gente entiende que el arte construye la sociedad y nos permite definirnos como pueblo. Mucha gente se envuelve en la bandera pero a los artistas nos toman como los enemigos, algo muy paradójico. Por una parte son muy patriotas pero prefieren ver películas o cómics producidos en América sin entender que la experiencia vital que les muestran no es la suya, es una alienación cultural sobrecogedora. Imágenes del cómic Con todo, soy bastante optimista y veo que cada vez más gente lee tebeos y los aprecian más pero es importante que haya más ayudas, el Estatuto del autor y demás. En Blackhand y Ironhead cuentas tus propias historias pero al mostrar arquetipos universales puede llegar a cualquier parte del mundo. En esta obra me valgo del género de superhéroes para hablar de lo que me da la gana, en este caso sobre el hecho de que construimos nuestra realidad a través de los mitos y qué hacer con esos mitos cuando ya no nos valen, podría haber usado el género negro o el western, como cuando John Ford trató este mismo tema en El hombre que mató a Liberty Valance. Quienes mejor han hecho a los superhéroes en el siglo XX son los norteamericanos pero Los tres mosqueteros no dejan de ser superhéroes. Cualquier libro de Dumas te puede funcionar como obra de superhéroes. «Cualquier libro de Dumas te puede funcionar como obra de superhéroes.» Superman es la idea que tenemos del héroe pero es una figura que existe desde Heracles. A mí los superhéroes me resultan más interesantes cuando los enfrento a la realidad y es lo que he hecho en Blackhand y Ironhead, cojo todo el bagaje que tengo como aficionado a los súpers y lo utilizo para llegar a donde yo quiero. Los personajes femeninos fuertes de David López. En tu trayectoria siempre has destacado cuando has realizado personajes femeninos que transmitían una sensación de realidad. Creo que es por la propia naturaleza de mi línea que es suave y se presta a ello. También hay que ver de dónde viene cada uno, cuando era chaval tuve la suerte de poder ir al estudio de Luis Royo y eso marca. La madre de un amigo me dijo que unos amigos suyos tenían un estudio de ilustración y que fuera allí a verles trabajar, allí compartían estudio Luis Royo e Isidro Ferrer y yo me plantaba allí a mirar sin molestar. Fue un privilegio para mí, con quince años descubrí que se podía trabajar dibujando, sin jefes, con amigos y música, yo quería eso para mí. Con dieciséis años ya usaba el aerógrafo y aún hoy uso el gouache como lo hacía Isidro Ferrer en los noventa. Curiosa combinación la de Luis Royo e Isidro Ferrer. Sí. Estar en esa edad pudiendo verlo y preguntando te cambia la vida. Allí me quité la angustia adolescente de no saber qué hacer con mi vida. Yo quería dibujar. Los dos tomos están prologados por dos grandes guionistas de aquí y de allá. El primer tomo lo escribe Kelly Sue DeConnick, consagrada escritora con la que coincidiste en Capitana Marvel. El prólogo del segundo lo realiza David Muñoz, guionista todoterreno de cine, series y cómic, claro. El prólogo de Kelly Sue fue una sorpresa de Astiberri, no lo supe hasta ver las pruebas del libro, fue un regalo precioso. Con dibujantes de aquí creo que no he llegado a trabajar, a David Muñoz lo tuve de tutor de guión, yo le mandaba mi historia y él me ayudaba a pulirla para sacar lo mejor de ella, me señalaba los fallos y me ofrecía ideas de cómo arreglarlos. Tener alguien así te da una seguridad total, le estoy infinitamente agradecido, es un gran profesor. Una imagen del cómic. En España lo edita Astiberri en papel en un formato similar al Universo de Albert Monteys. En el caso de Private Eye, primera obra de Marcos Martín para Panel Syndicate, la obra la edita Image en Estados Unidos. En mi caso, el primer tomo de la serie, está editada por Image en América, por Panini en Italia y por Urban Comics en Francia además de, como dices, por Astiberri en España. El segundo tomo estoy negociando las ediciones internacionales, es algo que me da mucha pereza pero es que no hay otra vía. Que se traduzca a muchos idiomas y que llegue a muchos lectores es lo que lo hace viable. Eso te obliga a asumir cargas que no son las habituales de los dibujantes. Cuando firmas con las compañías te desentiendes del resto pero ahora tienes que tener una visión más completa del mercado para ver dónde ubicarte. La verdad es que es apasionante pero agotador, hay que leer contratos, negociar con gente, revisar diseños, todo… pero a mi me gusta meterme en todos esos charcos. Una vez lo haces por primera vez ya sabes lo que esperar. La comunicación requiere mucha más atención de la que yo era consciente. En el caso de Astiberri, ellos hacen todo ese trabajo mejor que nadie, me consiguen entrevistas, sesiones de firmas, festivales, todo. Son ellos los pesados no como cuando estoy con la publicación digital, ahí estoy yo solo con mi Twitter. «La comunicación requiere mucha más atención de la que yo era consciente.» Tienes que vender producto. Sí. Y es muy aburrido pero ahora edito videos, hago textos, listas de correo… Aprendes más cosas y ves cómo funciona todo. Los dibujantes somos muy comodones y cuanto menos te mueves más te la cuelan. Es lo que decía Serrat: «Que la vida va en serio lo empiezas a comprender más tarde». Astiberri hace un trabajo fantástico de difusión, he trabajado con casi todas las editoriales de España y son los que mejor lo hacen, con diferencia. Te mantienen la obra viva más tiempo, lo que no puede ser es trabajar tres años para sacar tu libro y que desaparezca de las tiendas en tres meses, es inasumible. En Astiberri apuestan por los autores. Rey Gladiador Trabajan para que el libro esté de forma continuada en las tiendas. Es que es necesario. Con Planeta saqué un libro, Espiral, se agotó y no lo volvieron a imprimir ¿cómo es posible? De chaval en un Dunkin' Donuts me llamaba la atención que al cerrar se tiraban muchos dónuts, le dije a la manager que había que hacer menos, ella me explicó que si se te agotan es que has calculado mal. Cuando te quedan cien libros hay que imprimir más. El problema es que las grandes editoriales viven de las licencias de manga y superhéroes, les gusta sacar algún cómic de aquí de vez en cuando, que está muy bien, pero no pueden permitirse que eso que sacan compita con su propio producto. Por eso el autor tiene que saber dónde entra. Si se vende Catwoman en España no te beneficia en nada. Eso es. En el caso de Blackhand cobro por cada libro vendido. Yo no voy a irme de promoción tres semanas para vender Catwoman porque voy a cobrar lo mismo que si me quedo en casa, no tiene sentido. Cuando salió el tomo de Capitana Marvel hice el esfuerzo de ir a sitios a promocionarlo, pero le estaba quitando tiempo a mi familia para algo que no me iba a aportar nada. «Yo no voy a irme de promoción tres semanas para vender Catwoman porque voy a cobrar lo mismo que si me quedo en casa.» Cada vez hay más demandas de firmas pagadas por parte de los autores. Es algo que es habitual en Estados Unidos. Además, es que hay un mercado de libros firmados que se venden por más dinero. Es absurdo que yo genere el beneficio y que no cobre nada por ello. Hay que cobrar por el trabajo. El problema es que nos gusta tanto lo que hacemos que lo haríamos gratis y hay gente que se aprovecha. La obra reflexiona sobre la creación de los mitos. Image es una coperativa en la que ceden su nombre para que cada uno desarrolle su propio proyecto. Me parece una gran idea la de Image y cuando haya alguien con un mínimo de capital e idea para hacerlo en Europa le va a ir bien. En Image primero se pagan sus costes de producción y después se va a medias con los beneficios, algo mucho mejor que el sistema habitual. Has sacado dos libros de Blackhand y Ironhead hasta la fecha. Ya he empezado el guión de la tercera parte que será la última. A ver cómo responde la gente a esta segunda porque tengo muchas ganas de continuar. El título provisional es ¿Qué hacemos con papá? Es la sombra que sobrevuela toda la obra. ¿Qué pasa si tu padre es realmente malvado? Tengo una idea buena de cómo acabarlo, solo faltan los fondos. ¿Proyectos? Tengo dos en los que estoy trabajando a la vez. Uno para Estados Unidos y otro para España, pero lo siento, aún no puedo contar nada. Bocetos del cómic Bocetos del cómic de David López Un personaje del cómic Imagen del cómic Imagen del cómic de David López

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