«Te contaré un secreto: la mayoría de las personas que enseñan en las escuelas de cine no tiene ni idea de lo que hacen», Miguel Parga
Con esta sentencia demoledora Miguel Parga nos pone en alerta y abre los ojos en la introducción de Lo que no te enseñaron en la escuela de cine (Promopress, 2019). Pero que nadie se asuste, porque igualmente, para subsanar este jaro de agua fría, el autor viene cargado de consejos dirigidos a quienes quieren dedicarse al audiovisual.
En EEUU, cuna del motor de la industria de Hollywood y del audiovisual, el desempleo en el gremio del cine supera el 90%. Si trasladamos estos datos a un mercado como el español, donde la industria es más pequeña, los datos pueden ser demoledores. A pesar de todo, la gente sigue inundando las escuelas de cine con la esperanza de llegar a formar parte de alguna producción. Si es una carrera tan competitiva y con tan poco margen de llegar a ser alguien, ¿por qué meterse en este lío?
Para Miguel Parga, la respuesta está en nuestro ADN y nuestra necesidad ancestral del ser humano de narrar historias. Desde la prehistoria, cuando se reunían en torno a un fuego, hasta hoy cuando nos agolpamos en salas delante de una pantalla, los humanos hemos encontrado en las historias la mejor herramienta para explicar nuestro mundo.
También hay una componente de logro y de alcanzar nuestros sueños. Un buen narrador de historias va a obtener prestigio: «el público le atiende, se entretiene y aprende», dice el autor. «Es como un superpoder».
El cine y el audiovisual son el principal método de narración actual o al menos el más popular. Las películas tiene la capacidad de cubrir todos los aspectos de lo que somos. Además, hay un importante factor emocional, en el que queremos compartir nuestras historias con el resto del mundo. Trabajar en cine es un verdadero desafío a todos los niveles; el reto de llegar lo imposible. De ahí que el cine sea tan adictivo.
«El cine es una enfermedad y, como ocurre con la heroína, el remedio es más cine».
Frank Capra
Para destacar y darte a conocer en el muy competitivo mundo del cine y de los audiovisuales hay que aprovechar cualquier ventaja. Si en tu mente está ser un nuevo Spielberg, Scorsese o Kurosawa, este libro te será de gran ayuda. Lo que no te enseñaron en la escuela de cine se presenta como una guía esencial, en la que Miguel Parga combina el enfoque práctico y racional con la sabiduría de toda una vida dedicada a la profesión.
Lo más normal es que en la escuela de cine te enseñen la parte técnica: el guión, la cámara, el plató, el diseño de producción, la postproducción… Sin embargo, ¿qué sucede al terminar la formación? ¿Qué pasos hay que dar después de salir de la escuela? Miguel Parga también ahonda en esos aspectos fundamentales para ayudar al alumno en su motivación y para encontrar su camino.
Lleno de consejos y trucos de probada eficacia, este libro ayudará a quienes quieran dedicarse a esta industria a sacar el máximo partido de lo que aprendido en la escuela de cine. Miguel Parga ha pasado por todos los procesos y por todos los momentos, los más reconfortantes y los más duros; él mejor que nadie está en la posición de ofrecerte un cable para capear los momentos de frustración de la vida del artista y a mantener encendida la llama de la inspiración mientras te abres paso en el mundo de la cinematografía.