¿Cómo fusionar animación 2D y stop motion? El caso de «Los demonios de barro»

Nuno Beato fusiona animación 2D y stop motion en Los demonios de barro, una película que habla sobre el retorno a las raíces y la superficialidad de las relaciones humanas en la vida moderna.

Cartel de Los demonios de barro

Los demonios de barro se ha realizado durante los últimos cuatro años en las ciudades de Lisboa, A Coruña, Bilbao y Burdeos. La producción internacional combina stop motion con animación en 2D y 3D y cuenta con Carlos Juárez y Xosé Zapata como coproductores. Con un presupuesto de tres millones de euros y muchas horas de trabajo, ha contado con un amplio equipo de profesionales de larga trayectoria y se encuentra entre los nominados al Goya de Mejor Largometraje de Animación.

El largometraje cuenta con las voces de prestigiosos intérpretes gallegos como Isabel Navieira, Monti Castiñeiras, ganador del Premio Goya, el Premio Gaudi y el Premio EFA por El Hoyo. En esta tarea le acompaña, en esta ocasión, Raúl Campos, que también ha formado parte el equipo técnico de la película dirigida por Nuno Beato.

La película, inspirada visualmente en la cerámica tradicional portuguesa, cuenta la historia de Rosa y del retorno a sus raíces y la vida natural de campo y su aldea natal. Al mismo tiempo, trata temas de actualidad como la destrucción de la naturaleza, el abandono del campo, la superficialidad de las relaciones humanas en la vida moderna y la búsqueda de nuevas formas de vida en equilibrio con el entorno.

Fotograma de la película

La combinación de animación en stop motion y animación en 2D es una de las características diferenciales de esta película. Los demonios de barro es, por tanto, una historia de contrastes. Un contraste que se lleva al extremo hasta el punto de que se van intercambiando el stop motion y la animación 2D en función del lugar en el que transcurre la escena. Cuando Rosa está en la alocada y estresante vida de la ciudad, las animaciones son en 2D; en cambio, cuando el filme transcurre en la tranquila y soñolienta vida tranquila de la aldea, se da paso a la utilización del stop motion. Con esto no solo se consigue mostrar dos alternativas vitales tan diferentes como incompatibles, también se refleja la riqueza que puede tener la utilización de dos técnicas diferentes a lo largo de un mismo relato. 

nuno beato

Nuno Beato

El director portugués Nuno Beato es el director de la película. Lleva trabajando en ella más de ocho años y se muestra realmente satisfecho con el resultado siendo, además, el primer largometraje en stop motion de la historia de su país. Hablamos con él sobre el proceso de creación, la peculiaridad de fusionar técnicas o el crecimiento de la animación para adultos en los últimos años.

Una película de estas características exige mucho trabajo y dedicación, ¿nos podrías explicar cómo ha sido el proceso de creación?

Si, detrás de una película como está hay mucho trabajo; teniendo en cuenta, sobre todo, que es de stop motion. Y, además, añadiendo el Covid por medio la verdad es que el trabajo se ha duplicado. Los demonios de barro ha sido una coproducción entre Portugal, España y Francia y nos hemos dividido el trabajo. En Portugal hemos hecho toda la preproducción con storyboards, diseño de personajes y escenarios. Después hemos construido los pupets en Galicia y hemos vuelto a rodar a Lisboa con un equipo mezclado de españoles y portugueses. Después, toda la parte de 2D y 3D del inicio de la película la hemos hecho en Francia con un equipo de animación 3D. Y, por último, la postproducción la hemos hecho en España, así como parte de la música. En concreto, se ha hecho en el País Vasco.

Una clara curiosidad del filme es la utilización de diferentes técnicas de animación, ¿qué sentido tiene en la narrativa de la película?

Cuando empiezo a tener una idea para una película, no pienso primero en la técnica que voy a utilizar. Primero viene la construcción de la idea y, dependiendo de cómo avanza la narrativa, la técnica se va adaptando. Esta es la intención siempre. Por tanto, en esta película se mezclan 2D, con 3D y stop motion porque también habla de distintos momentos de Rosa, el personaje principal. En el inicio está en la ciudad, con un mayor distanciamiento de los demás, y está parte es más fría, con líneas más duras, un 3D bastante seco. Cuando llega al campo a la casa del abuelo todo se llena de texturas, y entra el stop motion con el color barro. Y aquí tenemos otra Rosa, que quiere cambiar y sentir los defectos que trae el stop motion, la textura, la realidad de la vida y su reconstrucción interna. Son dos momentos distintos de la película y la aplicación de las diferentes técnicas tiene la intención de reforzar la narrativa.

«Cuando empiezo a tener una idea para una película, no pienso primero en la técnica que voy a utilizar»

Nuno Beato

¿Cómo está siendo la reacción del público a la utilización de esta variedad de técnicas?

Este contraste entre 2D, 3D y stop motion representa dos escenarios distintos: la ciudad y el campo. Es curioso porque el público se engancha más con el stop motion, y esta era precisamente mi intención. El objetivo con la utilización de estas técnicas es que cuando el público llegara al stop motion se diera cuenta de que todo gana vida, gana intensidad. Muchas veces me dicen que el 3D es más raro, más extraño… y yo me quedo contento con eso porque esa era mi intención. El 2D inicial no lo utilizamos para que quede más bonito, sino para que tenga un contraste bestial con el stop motion. Y lo que busco que el público sienta es que hay un inicio de la película más distante, que es como está Rosa en ese momento, y que después se enganchen con el stop motion y sientan una película más humana y cariñosa.

Fotograma de la película

Está claro que el significado del barro en la película va mucho más allá del título, ¿qué simbología tiene?

El barro tiene una importancia grande en la película. Primero, si hablamos de las figuras de los demonios, están creados con una cerámica del norte de Portugal, en concreto de la zona de Barcelos, y principalmente están inspirados en el trabajo de una señora que se llama Rosa Ramalho. Esta señora, además de darme el nombre del personaje principal, era una ceramista del pueblo que realizaba un trabajo muy sencillo, pero con mucha emoción y con una autenticidad muy grande. Esto es lo que quería yo para los demonios de esta película, que están hechos por el abuelo del personaje principal y no quería que tuvieran el vicio del dibujo que puedo tener yo. Con este figurado he intentado conseguir un resultado más auténtico y lo he hecho principalmente inspirándome en las figuras que ya había creado Rosa Ramalho.

«Los demonios, están creados con una cerámica del norte de Portugal, en concreto de la zona de Barcelos»

Nuno Beato

El barro se crea con agua y tierra. Por un lado, el agua es uno de los problemas en la trama de la película, no voy a hacer más spoiler (ríe). Por otro, la tierra es lo primero que se siente cuando se pisa el suelo. En Portugal podemos usar la palabra «tierra» con otra intención, cuando yo digo que me voy al pueblo digo que me voy a «o meu terra» y es muy natural darle uso en este contexto. En el fondo, es una palabra que tiene una intención que está totalmente adaptada a lo que busca la protagonista de la película: encontrar sus raíces, que están en su tierra, en el barro.

Fotograma de la película

La animación para adultos no para de crecer y cada vez son más las piezas audiovisuales animadas que llegan al gran público, ¿qué pasos crees que le falta por dar al mundo del cine y a la sociedad para prestigiar de una vez por todas la animación para adultos?

Los demonios de barro es una película familiar. Es verdad que es un tema más adulto, pero toca a todas las generaciones sin ser un cine cómico. No es el típico cine para niños al que estamos acostumbrados, pero los jóvenes también necesitan ver películas más poéticas, con mensajes que sean más fuertes y que les hagan pensar. A los niños no solo les gustan las cosas divertidas, y hay que enseñarles que hay mucho más que eso en animación. La animación es un mundo que tiene de todo, de todas las técnicas, de todos los estilos y para todas las edades… Y, además, no tiene por qué estar dirigida para niños, eso es un error antiguo. La realidad es que la animación adulta existe desde siempre, pero llegar al público generalista es difícil.

«La animación adulta existe desde siempre, pero llegar al público generalista es difícil»

Nuno Beato

La distribución aquí tiene un papel importante. Si seguimos enseñando a las nuevas generaciones que la animación es un producto exclusivamente para niños es un problema. Creo que en las nominadas de este año a los Premios Goya sí que hay una intención por parte de la Academia por demostrar que la animación no es un producto exclusivamente para los más pequeños y para ello es importante que gane una película que esté dirigida a todos los públicos. Hay que formar a los públicos y creo que las nuevas generaciones ya están más abiertas a entender que hay animación de calidad que no es para niños, que tiene un mensaje adulto, que está bien construida y que puede ser un producto con una narrativa tan elaborada como en imagen real.

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