El Museo de Arte Moderno de la Ciudad de París organiza una retrospectiva de la obra de Bernard Buffet (1928-1999), considerado uno de los pintores franceses más famosos del siglo XX, y también uno de los más controvertidos. A través de una selección de un centenar de cuadros, la exposición ofrece una reinterpretación de la obra muy poco vista del autor.
Debido a que el Museo de Arte Moderno de París es el único museo público con una gran colección de la obra del artista (acogida en 1953 gracias a Girardin y en 2012 por la donación de Ida y Maurice Garnier), resultaba legítimo llevar a cabo este proyecto que se remonta a los primeros contactos con su distribuidor histórico Maurice Garnier (1920 – 2014), hace unos diez años. Sin embargo, la dimensión durante muchos años polémica de la obra de Bernard Buffet la había retrasado hasta ahora.
Hoy en día, con el paso del tiempo, muchos artistas, profesionales y aficionados, están reconsiderando su trabajo y lo que éste podía tener de desconcertante, se ha atenuado parcialmente. Mediante la exploración del conjunto de la obra en un viaje retrospectivo, pero muy selectivo debido a la alta productividad del artista, la exposición muestra la calidad y variedad insospechada de la que probablemente permanecerá como una de las obra pictóricas más fascinantes del siglo pasado y de influencia más significativa.
El recorrido, organizado en sentido cronológico, comienza con los inicios de Bernard Buffet, un momento en que sus obras renuevan el sentido de todo un repertorio de formas y objetos. El contexto artístico de la posguerra, tiempo de debate en torno a la cuestión del realismo, la figuración y la abstracción, será evocado. Se trata de mostrar al pintor como un artista paradójico, quien se refiere a la pintura de historia como el momento de la desaparición del sujeto, y quien relaciona la pintura austera con la riqueza, el gran éxito de público con el rechazo al mundo del arte.
De este modo, junto a sus temas preferidos −autorretratos, bodegones− se presentan otros diferentes explotados sistemáticamente por Bernard Buffet durante sus exposiciones anuales en la Galerie Garnier: ciclos religiosos (La Passion du Christ), literarios (L’Enfer de Dante, Vingt mille lieues sous les mers) y alegóricas (Les Oiseaux, Les Folles). Además, se hace hincapié en la reflexión constante de Bernard Buffet en la pintura de historia (Horreur de la Guerre) y la historia de la pintura (Le Sommeil d’après Courbet) hasta La Mort, espectacular serie final refiriéndose al memento mori medieval.
A través de una extensa documentación, la exposición que se podrá ver hasta el 5 de marzo, solicita la opinión del público sobre los mecanismos de esta notoriedad.