– «Sí, dígame». – «Hola, soy … Ahora resulta que para que te encarguen una buena marca te tienes que ir a jugar al golf con los directores generales y la verdad […]»
–
A veces suena el teléfono y al otro lado están algunos de esos profesionales de los que escribimos. Y muchas veces me apetecería contar todo lo que dicen porque suelen ser mejores esas conversaciones que las entrevistas o los artículos que publicamos. Y cuando a un diseñador que tiene un Premio Nacional le oyes decir que para conseguir grandes proyectos uno se tiene que comprar una bolsa de palos de golf, pues se te cae el mundo al suelo.
[…] Sí, claro. Te puedes creer que en este país no hay memoria por los profesionales. En Estados Unidos, Milton Glaser es toda una institución al que todavía se le encargan proyectos importantes. Aquí, si tienes más de 40 años ya eres un dinosaurio que no interesas a nadie, y mucho menos a la Administración para que te den un homenaje. […]
En los corrillos cerveceros es donde uno puede medir mejor la profesión y lo que le pasa a los demás. A veces nos torturamos con que no tenemos trabajo, que nuestro estudio es un desastre, pero un par de cervezas con los colegas de profesión y te das cuenta que no estás tan mal.
[…] Antes cuando ibas a las fiestas de diseñadores te encontrabas al alcalde, a los asesores, a los concejales… ahora tienes que ir tú a perseguirlos a sus despachos para que se den cuenta de lo que hacemos.
Pues eso, que los políticos han pasado de ser seres a quienes les interesaba la cultura en general. Tenían cierta curiosidad, tampoco vayamos a pensar que antes eran tan geniales, que nos encanta idealizar el pasado. Pero es verdad que ahora los políticos están a otra cosa. Y sus amigos, los que les aplauden las risas son una verdadera corte de catetos y de ahí no puede salir nada bueno.
[…] Pues no paramos de hacer cosas. No tengo tiempo ni de respirar. [Luego miras su timeline de facebook y va a ser que no]
A veces tienes que hacer cábalas para descubrir lo que realmente dicen algunos que por no decir la verdad mienten más que hablan. Esta profesión es muy de aparentar que todo va bien aunque la casa se nos esté cayendo a pedazos. Afortunadamente, la situación actual ha hecho que muchos ya no tengan pudor en reconocer lo que todo el mundo sabe. La cosa va mal para casi todos.
[…] ¿Qué por qué no enseñamos más trabajos teniendo 3 oficinas en el mundo? Pues porque hacemos mucha mierda que no se puede enseñar. Hay que comer y no todo lo que hacemos es tan digno como queremos hacer creer.
Pues eso lo mismo que todos. Qué para comer hay que hacer de todo. Si un diseñador de nivel internacional tiene que hacer ‘mierda’ pues que no nos va a pasar a nosotros. Y es que cuando la gente se sincera y cuenta las cosas como son es mucho más divertido que todo el misticismo que le queremos dar a nuestro trabajo.
El telefono suena y cuenta cosas mucho más interesantes que todos los vídeos o que todas las entrevistas de diseñadores que pueblan la red. Algún día cuento alguna anécdota más, que estas son las de esta semana.
Actualizado 14/07/2014