Dado que Pentagram ha estado rediseñado la imagen de los estudios Warner Bros durante años, no extraña que haya sido esta agencia la elegida para hacerlo de nuevo.
La ya icónica marca de Warner Bros es de sobra reconocida por el público. Su larga trayectoria y su aparición en todas sus películas ha hecho posible que el espectador encuentre esta marca muy familiar. Pero a pesar de ello, el estudio no contaba con una imagen que cohesionara todos sus productos audiovisuales. Necesitaban un rediseño que permitiera guardar bajo un mismo paraguas y de forma coherente todas sus producciones sin importar en qué tipo de plataforma vaya a verse. Así, Pentagram ha sido la agencia encargada de llevar a cabo el nuevo rediseño del logo de Warner Bross.
Warner Bros tomó la decisión de llevar a cabo este rebranding ya que parecía encontrarse en un punto entre el pasado y el futuro.
De hecho, en 2023 celebrarán su 100º aniversario, por lo que los ejecutivos ya se preparaban para asumir nuevos cambios a nivel comercial.
Según Dee Dee Myers, vicepresidente ejecutivo de comunicaciones corporativas y asuntos públicos mundiales de Warner Bros., la proliferación de contenido en streaming ha ampliado la competencia del estudio más allá de otros estudios de cine, surgiendo plataformas como Netflix, Hulu, Disney+ y servicios similares.
La identidad visual les parecía un poco anticuada, pero es que además encontraron que también necesitaban cambiar la estrategia de marca.
Con el problema identificado y definido acudieron a Pentagram. Más concretamente al equipo de Emily Oberman.
Pentagram, en lugar de ver esta tensión entre el pasado y el presente como un problema, lo vieron como una solución de diseño para la marca. Teniendo en cuenta que se trata de una marca muy consolidada a nivel visual, consideraron que con unos ajustes se podría reestablecer la coherencia general al mismo tiempo que se podía marcar la diferenciación que la compañía buscaba. Todo ello contando con que la marca aparecería en todo tipos de dispositivos, ya sean móviles o pantallas de cine. Según Pentagram, lo que realizaron no fue un rebranding sino una recalibración.
Según Oberman, el equipo tenía como objetivo darle a Warner Bros una voz personal que, sin dejar de hablar de quiénes son, hablara sobre futuro. También que esta pudiera diferenciar a la compañía de sus competidores al mismo tiempo que pudiera establecer su propio espacio en el mundo online. Para ello, tendrían que transmitir algo en lo que la Warner Bros cree fielmente; en el poder de la historia.
Con este objetivo en mente, durante un año estuvieron trabajando en la estrategia de la marca del rediseño del logo de Warner Bross. El resultado fue una guía visual de la marca. En cuanto al logo, este seguiría siendo reconocible y familiar para el público, pero sufriría algunos cambios con la finalidad de hacer el escudo más elegante y limpio. Para ello, se redibujaron los caracteres ‘W’ ‘B’ en busca de un mejor equilibrio. El color también se modificó. Se escogió un azul más brillante.
Hay dos versiones del logotipo realizados en el trabajo de rediseño del logo de Warner Bross: una versión plana y una versión dimensional —solicitada por las divisiones de TV y cine de Warner Bros—. Las paletas secundarias dependerán del contenido en sí. El equipo de Pentagram quería crear un logotipo que se viera como contemporáneo y al mismo tiempo funcionar como una esponja que absorbiera cualquier historia que Warner Bros fuera a contar.
La tipografía también ha sido un elemento fundamental en este rediseño. Se ha creado Warner Bros Sans, una tipografía creada a partir de las iniciales ‘WB’ del escudo e inspirada en el Art Decó de los años 20, década en la que nació la compañía. Con esta tipografía pretenden que, aunque el escudo no esté presente, se note que se trata de Warner Bros.
Tras tres años desarrollando la estrategia de marca, el desarrollo visual y los preparativos del lanzamiento, ya puede verse el resultado de todo este trabajo implementado en los soportes de Warner Bros, incluido el famoso depósito de agua.