La tierra es una de las promesas clave de la calidad de un vino, y el diseñador Eduardo del Fraile utiliza precisamente eso, tierra, para vestir esta botella en honor a Agapito Rico, uno de los más importantes vitivinícola de Jumilla.
Esta botella, Tierra, fue diseñada en honor a Agapito Rico, una figura importante en la denominación de Origen de Jumilla. Fue un pionero en la elaboración de vino. Contando con la uva Monastrell consiguió domesticar lo mejor de su sabor, sobre una tierra árida.
Agapito es un experto cultivando el vino con un clima de más de 3.000 horas de sol al año y escasas lluvias. Esos terrenos capaces de dar buenos vinos han sido compañeros de este carismático productor de vino durante muchos años.
La tierra nos retrotrae al origen directo de la vid y nos habla de la pureza del vino, expresa y despierta un sentimiento mediante una única textura.
Esta es la prueba de que la imagen, o el packaging, a veces es mucho más importante que la propia marca. Un ejemplo impresionante de creatividad.
