Surface Pro 3, un dispositivo en el que confluyen varios caminos digitales. Un dispositivo portátil con procesador de ordenador portátil y pantalla táctil con funciones de tableta. Un híbrido que puede abrir la puerta de lo que serán los futuros dispositivos (ordenadores) portátiles.
Habitualmente llegan a la redacción dispositivos (tabletas, móviles, cámaras… ) para que los probemos y demos nuestra opinión. En general los dispositivos solo se pueden probar de verdad si apartas la máquina (portátil, ordenador, móvil… ) que utilizas habitualmente y durante semanas utilizas el dispositivo a probar.
Desprenderse de tu ordenador es un trauma importante. Pero con la nueva Surface Pro 3 –con Windows 8– la cosa no ha sido tan grave. En primer lugar se comporta perfectamente como un buen portátil –habitualmente trabajo con un MacBook Pro– y se convierte en una estupenda tableta XL con una pantalla gigante comparada con la de mi iPad 2.
Tiene lo mejor de cada lado, pero a la vez no llega a ser mejor en ningún caso. Microsoft lleva unos años intentado crear un segmento o incluso inventar lo que sería el nuevo ordenador portátil con funciones de tableta o la tableta con capacidad de ordenador portátil.
Con dos semanas de pruebas podemos decir que Surface es un buen invento, aunque necesita mejorar. Es un ordenador totalmente funcional con procesadores Intel Core i3, i5 e i7 con lo que se puede trabajar con cualquier software habitual para tu ordenador. Y por otro lado posee una pantalla táctil de alta resolución como la de una tableta y opera del mismo modo.
Ordenador
Trabajar con tu software habitual significa que puedes contar com todo el paquete de Adobe Creative Cloud (Photoshop, InDesign, Illustrator, Premiere… ) exactamente igual que con tu ordenador Mac habitual. Tal vez la tarjeta gráfica no es la más potente del mercado –Intel GMA HD Graphics 4400 (Integrada)– pero es más que suficiente para la mayoría de procesos. Ralentiza un poco cuando fuerzas el dibujo a toda velocidad, pero es un uso extremo que no es tan habitual ni necesario.
Pesa poco –800 gramos– tiene un buen acabado en metálico mate –magnesio- que le confiere una buena protección. El teclado tal vez es el punto más débil. Es una especie de apéndice muy endeble y si utilizas mucho el teclado o el trackpad está muy por debajo de la experiencia de un ordenador portátil.
El pie trasero es muy efectivo y funciona a la perfección para mantener el ordenador en vertical y funcionar así como pantalla. Una pantalla de alta resolución. 12 pulgadas y de 2560 x 1440 píxeles. Se nota bastante la calidad en la imagen.
Tableta
Aunque a muchos les parecerá raro una tableta tan grande, 12 pulgadas para muchas cosas es una verdadera gozada. Para lectura online la Surface Pro 3 es ideal. Puedes ver las webs en su máximo esplendor sin necesidad de hacer scroll. Para jugar es perfecta. Mejor pantalla equivale a mejor experiencia. El sonido puede mejorar mucho. Y para dibujar dispones de un tamaño A4 con lo que es más que suficiente.
Lápiz óptico
Como tableta puede funcionar y opera con todos los controles a los que estamos acostumbrados a hacer con los dedos de la mano. Pero además incorpora un lápiz óptico. Esto supone que es fácil utilizarlo como tableta gráfica –estilo Wacom– y a su vez como bloc de notas con las innumerables aplicaciones que hay para ello. Complemento ideal. Hay que resaltar que mientras trabajas con el lápiz, la mano puede apoyarse sin problemas de interactividad –solo en Photoshop–.
La calidad del sensor no alcanza el detalle ni los niveles de presión de una tableta Companion de Wacom, pero es más que bueno el rendimiento. Hemos probado con lápices Wacom pero desde que la empresa japonesa abandonara el proyecto ya no funcionan sus lápices como ocurría en las primeras versiones de Surface.
Software
Una cosa muy buena, y otra no tanto. Con Surface Pro 3 puedes instalar todo el paquete de programas de Adobe Creative Cloud igual que lo haces con cualquier otro ordenador y trabajar exactamente igual. Photoshop, Indesign, Illustrator… incluso Premiere, funcionan a la perfección. Pero, y aquí está lo bueno, Adobe ha ideado un menú extra para esta tableta que permite trabajar con formato ‘táctil’. Si aplicamos la opción ‘táctil’, todos los menús cambian para adaptarse a iconos más grandes y funciones pensadas para operar con el dedo.
Aunque aparentemente no es muy funcional, cuando te acostumbras a intercambiar el lápiz, con los dedos resulta de lo más natural e intuitivo. Se parece mucho al proceso de volver a tocar el papel y el lápiz pero con funcionalidades extra. En la Surface 3 puedes dibujar con exactitud con el lápiz y mover, ampliar, desplazar con la mano… Una experiencia muy interesante.
La parte mala del apartado software es que todo corre sobre Windows 8. Aunque en la redacción me dicen que son manías de usuario Apple, resulta muy frustrante ver cómo han pensado ciertas funciones del sistema y dónde colocan algunos comandos. Windows 8 es un sistema interesantísimo en muchos aspectos. Une aspectos como información, ocio, sistema operativo, software… de una manera muy integrada y fácil, pero hay cosas que parecen pensadas por un comité o poco testadas. Qué voy a decir que no se haya dicho del sistema operativo de Microsoft.
Conclusión
Surface Pro 3 es una máquina muy, muy interesante. Tanto que puede ser una opción muy realista para muchos. Bastante mejor, en cuanto a funcionalidad (Ordenador+Tableta), que un MacBook Air. El concepto parece tan natural que se hace duro pensar que Apple no haya pensado en este formato híbrido. Wacom ya pensó en él con la Wacom Companion, pero es un producto mucho más pesado y caro.
Si este producto lo hubiera lanzado Apple –y estamos seguros que lo hará– sería lo más de lo más, y sería el objeto del deseo de muchos creativos. Si a esto le añades la posibilidad de unir el software de Adobe con opción táctil es una verdadera opción a tener en cuenta.
Respondiendo a la pregunta del titular, este es el camino para reinventar el portátil y mejorar la tableta. La tecnología permite en estos momentos crear este nuevo producto que nos libere de tener dos aparatos en la bolsa de viaje, o en el bolso de mano. Vale la pena ver el vídeo final porque te haces una idea de las posibilidades y de lo que nos espera.