La portada original de Born In The USA se ha revalorizado con los años. Actualmente forma parte de los fondos de la sección Arquitectura y Diseño del MoMA de Nueva York. Un gran trabajo de dirección de arte que el 4 junio de 2019 ha celebrado su 35 aniversario y que lleva la firma de Andrea Klein y la fotógrafa Annie Leibovitz.
La portada del álbum Born in the USA es una de las más célebres de la historia del rock. El hecho de que el protagonista, Bruce Springsteen, una rock star en toda regla por aquellas fechas esté de espaladas al público mostrando el trasero y no la cara en primer plano, ya era un elemento que de por sí suscitaba una llamada de atención.
El magnetismo de la fotografía se vio realzado por la posición del cantante y el fondo elegido para la toma: la bandera de Estados Unidos. Y con ella, llegó el escándalo.
Habrá quien piense: «Escándalo, ¿por qué motivo? Si no se ve nada». Quizás para el público europeo no, pero sí para el estadounidense. La polémica no llegó por el trasero del cantante, sino porque alguna mente perturbada pensó que la imagen daba a entender que Springsteen estaba vaciando su vejiga sobre la bandera de Estados Unidos.
El trabajo de Annie Leibovitz y Andrea Klein
El álbum Born in the USA se publicó en junio de 1984. La portada fue fruto del trabajo conjunto de Bruce Springsteen, la fotógrafa Annie Leibovitz y la directora de arte Andrea Klein. Los tres llevaban tiempo dando vueltas una imagen que simbolizara los planteamientos del séptimo disco del cantante. Jon Landau, manager de Springsteen, sugirió una simple bandera americana de las pintadas por Jasper Johns, pero finalmente la descartaron.
Springsteen había comprado una bandera enorme de Estados Unidos y empezaron las sesiones de fotos. Tras cinco o seis tomas no conseguían el resultado buscado. Sentían que resultaba peligroso entrar en imágenes muy evocadoras, míticas y patrióticas, y eso es lo que estaban consiguiendo. Revisando las imágenes, la diseñadora Andrea Klein y Bruce se percataron de una imagen tomada sin más, sin ninguna premeditación, que Leibovitz había desechado.
Justo habían obtenido la portada que buscaban. A Springsteen se le veía en su propia salsa, con unos vaqueros gastados, camiseta blanca, la gorra roja en un bolsillo y la pierna derecha un poco adelantada.
Con esta pose, el trasero del cantante convertía la bandera en un elemento de fondo meramente decorativo. Esa distancia respecto a la bandera es la que buscaban, pero sin que ésta de desapareciera.
Los colores blanco, rojo y azul más la imagen del culo de Springsteen hicieron de esta portada una de las más célebres de la historia del rock. La polémica llegó en base a los rumores que decían que el cantante realmente estaba orinando sobre la bandera. La negativa de Springsteen sobre este punto fue rotunda. Preguntado en una entrevista, el cantante afirmó:
«Sacamos un montón de fotos y finalmente la imagen de mi culo era mejor que la de mi propia cara, y acabó siendo la portada. No tenía ningún tipo de mensaje secreto, no hago eso normalmente. Pusimos una bandera en la portada porque la primera canción se llama Born In The USA, y la temática principal del disco tiene relación con lo que he estado escribiendo durante los últimos seis o siete años. Pero la bandera es una imagen poderosa, y cuando sacas ese tipo de cosas, no sabes lo que se va a hacer con ello».
Sea como fuere, el resultado del trabajo conjunto de Annie Leibovitz y Andrea Klein es magnífico. La imagen creada por ambas para la portada del álbum Born in the USA de Bruce Springsteen forma ya parte de la historia del rock.