La fundición tipográfica neozelandesa liderada por Kris Sowersby ha sido la encargada de hacer una tipografía corporativa a medida para el gigante de los pagos online.
Por una simple cuestión de identidad de marca y de, por qué no decirlo, un sustancial ahorro a largo plazo de costes en licencias, son muchas las corporaciones que encargan a agencias y fundiciones tipográficas el desarrollo de una fuente corporativa a medida.
El caso que nos ocupa hoy es el de Paypal Inc., la multinacional estadounidense líder en el sector del comercio electrónico. Esta empresa nació en 1998 y tras varios cambios en su imagen corporativa es ahora, en 2016 y tras dos años de desarrollo, cuando por primera vez anuncia una tipografía propia.
PayPal Sans es una familia tipográfica de 14 pesos diseñada principalmente para pantalla y que consta de dos subfamilias: PayPal Big y PayPal Small, y que ha sido desarrollada por la fundición tipográfica neozelandesa Klim Type Foundry codo con codo con el equipo de diseño de producto de PayPal y con la ayuda de Ben Kiel en la conceptualización e investigación y de FontWerk y Noe Blanco en la producción.
Fue en 2014 cuando PayPal se puso en contacto con Klim Type Foundry —tal y como explican en su blog— para la realización de una tipografía sans-serif, haciendo mucho hincapié en su utilización en teléfonos móviles, su eficiencia tanto de rendimiento como de ahorro de espacio en cualquier resolución y la importancia, más que obvia, de la utilización de numerales.
«Estructuralmente esto significaba letras con detalles robustos, terminales planos y contraformas abiertas. Estilísticamente esto significaba una tipografía con un diseño humanista. ‘Su espíritu’ —según el briefing— ‘debe ser fluido, agradable, fácil, tranquilo y humanista’», cuenta Kris Sowersby.
De esta manera, desde Paypal parece que tenían claro que querían huir de esa plaga neo-grotesca ‘helvetizadora’ que está atacando a Silicon Valley. El resultado ha sido una sans-serif humanista en la que se ha conseguido una óptima relación entre proporciones para trabajar sobre todo en la app móvil tal y como se puede comprobar en las pruebas de concepto que han presentado.
Pero al margen de todas estas cuestiones que pueden ser más o menos novedosas, lo que a mí más poderosamente me ha llamado la atención es, sin duda alguna, el mimo que han puesto en desarrollar dos estilos enfocados específicamente para funcionar a diferentes tamaños: PayPal Sans Big y PayPal Sans Small. Y es que es precisamente ahí donde radica la belleza de este proyecto, en detenerse a observar cómo en la versión ‘small’ las proporciones buscan la ganancia de espacio, el contraste se afina, los detalles superfluos desaparecen y el espacio se hace más generoso; y en cambio, en la versión ‘big’, las letras se relajan y los rasgos comienzan a aparecer como argumentos incontestables a nuestras preguntas.
Te invito a que pierdas un minuto en observar ambas versiones porque las sutilezas que te sorprendan desarmado en el camino son, simple y llanamente, las que hacen que amemos la tipografía.
