Marina Abramović es una artista serbia especializada en performances. Descrita a sí mima como «Madrina del arte de la performance», lleva más de 30 años en activo, ofreciendo al público obras que exploran la relación entre el artista y este.
Marina Abramović nació 30 de noviembre de 1946 en Belgrado, Serbia. Su interés por las artes surgió desde pequeña, con seis años empezó a recibir clases de piano y, aunque no de pintura, era una actividad que practicaba con asiduidad.
No fue hasta 1965 cuando empezó a estudiar en la Academia de Bellas Artes de Belgrado. En 1972 completó sus estudios de postgrado en la Academia deBellas Artes de Zagreb, Croacia. Un año mas tarde, mientras preparaba su primera performance como solista llamada Ritmo 10 —la primera de una serie de cuatro performances—, daba clases en la Academia de Bellas Artes de NoviSad.
En esta primera performance, Marina Abramović exploró elementos rituales y los gestos empleando para ello 20 cuchillos y dos grabadoras.
La performance consistía en que la propia artista jugaba al juego ruso de dar golpes con el cuchillo entre los dedos abiertos de la mano. Cada vez que se cortaba, cambiaba de cuchillo, grabando todo este proceso. Una vez se hubo cortado 20 veces, reproducía la grabación e intentaba reproducir los mismos movimientos y sonidos. Con ello pretendía unir pasado y presente. Con esta performance, Marina Abramović abrió un camino sobre la consciencia del artista
Entre las obras destaca: Artist Body: Performances 1969–1998; The Bridge / El Puente,1998; Performing Body, 1998; Balkan Baroque, (Pierre Coulibeuf, 1999); Public Body: Installations and Objects 1965–2001; Marina Abramović, 2002; Student Body, 2002; The House with the Ocean View, la pieza de 2002 del mismo nombre en la que Abramović vive sobre tres plataformas abiertas en una galería con solo agua por 12 días; Marina Abramović: The Biography of Biographies, 2004; Balkan Epic, (Skira, 2006); y Balkan Erotic Epic, como productora y directora, Destricted (Offhollywood Digital, 2006.
La obra de Marina Abramović, además de haber alcanzado elevadas cifras de ctización en el mercado del arte contemporáneo, es muy extensa.
Una de las obras más conocidas y que dejó una gran impronta emocional en el público fue The artist is present (2010), en la que la artista permanecía sentada en una silla en el MoMA y esperaba que los asistentes se sentaran frente a ella y la miraran a los ojos. Lo más memorable fue el momento en el que, supuestamente, por sorpresa se sentó el que fue su compañero artístico y sentimental durante varios años, Frank Uwe Laysiepen. Fue allí donde se encontraron tiempos después de su ruptura.
La artista y su obra cuentan con numerosos galardones como el León de Oro, XLVII Bienal de Venecia, 1997; Niedersächsischer Kunstpreis, 2003; New York Dance and Performance Award (The Bessies), 2003; International Association of Art Critics, Best Show in a Commercial Gallery Award, 2003; Condecoración Austríaca de Ciencia y Arte (2008); Premio al Liderazgo Cultural, American Federation of Arts, 26 de octubre de 2011; Premio A La Excelencia ’13 de julio’; Oso Berlinés (2012), entre otros.<
Según la Marina Abramović, en sus performances es fundamental el intercambio emocional entre esta y el público; busca esa energía que se crea cuando la obra entra en interacción con el espectador: «Nunca podría dar performances privadas, en casa, porque no tengo público […] Cuanto más público hay, mejor es la performance, más energía recorre el espacio. El público debe dar un paso histórico y volverse uno con el objeto», explica.
→ mai.art