Lance Wyman (Newark, USA – 1937), reconocido como uno de los mejores diseñadores estadounidenses del siglo XX, es especialista en el diseño de señalética de ciudades, de eventos, de medios de transporte y de instituciones. Su trabajo más célebre es el desarrollado entorno de los Juegos Olímpicos de 1968 en México, el cual se ha constituido en todo un referente.
Lance Wyman nació en Newark, Nueva Jersey (Estados Unidos) en 1937. Durante su infancia su abuelo fue una gran influencia ya que de él aprendió a contar historias, habilidad que más tarde emplearía para desarrollar su trabajo como diseñador. Y durante su adolescencia, trabajar con su padre en un barco de pesca comercial y su trabajo de verano en una fábrica de Nueva Jersey, marcaron el modo en que Wyman entendería el diseño; de un modo más técnico y funcional; sencillo pero potente.
Se graduó en diseño industrial en el Pratt Institute en Brooklyn en 1960 y empezó a trabajar para General Motors durante un programa de verano para estudiantes. Allí realizó su primer trabajo profesional: el diseño del logotipo de Delco y el packaging a partir de un concepto de marca.
Empezó a desarrollar su trayectoria profesional diseñando gráficos para pabellones de ferias mundiales en el estudio William Schmidt y en el de George Nelson después. Más tarde se trasladó a México, donde ha realizado la mayoría de sus trabajos más conocidos como la imagen de los Juegos Olímpicos de México de 1968 y la gráfica institucional del metro de la Ciudad de México.
«Las dos formas básicas de aprender a representar y a comunicar objetos, acciones y sensaciones son con palabras y con imágenes. Las palabras son una manera efectiva de comunicar ideas complejas e interrelacionadas, pero es a través de los símbolos con los que se pueden cruzar las barreras lingüísticas»
Lance Wyman
También diseñó el logotipo de los hoteles Camino Real y Presidente Chapultepec, el del Centro de Investigaciones de Diseño industrial (CIDI UNAM) y los logotipos de los museos MARCO (Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey) y Papalote (Museo del Niño, Ciudad de México); realizó la imagen de HYLSA, la del centro comercial DeTodo, la imagen de La Moderna y la imagen de Central de Abasto. Incluso, también en México, llegó a participar en el diseño de la identidad visual para la Copa Mundial de Fútbol de 1970.
Regresó a Nueva York en 1971. Allí creó, junto a Bill Cannan, la empresa Wyman & Cannan, asociación que duraría ocho años. Parlelamente, desarrolló su trayectoria docente enseñando en Parsons School of Design. En 1979 abrió su propio estudio Lance Wyman Ltd.
«Uno de los últimos proyectos que hice en 1966 antes de partir hacia México fueron las gráficas para la terminal de Aerolíneas Argentinas en New York».
Lance Wyman
Lance Wyman ha despuntado por su creatividad y por su habilidad para diseñar eficientes sistemas de señalización que ofrecen a los usuarios información de forma consistente, sencilla y clara. De hecho, Philip Meggs en su libro: A History of graphic design apunta que Wyman es «uno de los más acertados sucesos en la evolución de la identificación visual».
En 2014 se publicó Wyman, la primera publicación retrospectiva de su obra. El libro está escrito por el propio Lance Wyman y por Linda King. A lo largo de sus 264 páginas, el libro reúne algunas de las aportaciones más importantes de Wyman.
En 2016 salió a la luz una polémica que ponía en duda la verdadera autoría de Wyman de la identidad visual de los Juegos Olímpicos de México 68. Según explicó Javier Ramírez Campuzano, hijo del arquitecto Pedro Ramírez Vázquez (1919-2013), lejos de ser la persona que ideara la imagen (logotipo y diversas aplicaciones incluidas) Wyman solo participó y colaboró como otros profesionales (Beatrice Trueblood y Eduardo Terrazas ) en el proceso, ya este fue contratado como ayudante en el departamento de diseño, realizando trabajos auxiliares.
«Cuando descubrí la cultura mexicana, me enamoré. Las primeras culturas sabían cómo usar la geometría para crear imágenes de la mitología, de la naturaleza y texturas puras.»
Lance Wyman
También en 2016 se publicaron los diarios visuales de Lance Wyman (1973—1982). Desde 1973, Lance Wyman fue registrando su producción diaria. Finalmente, United Editions publicó estos diarios visuales en formato libro. Este volumen de 872 páginas será diseñado por el estudio londinense Spin. En este diario se puede ver cómo en el trabajo de Wyman nada es desechado: todo está conectado con un cuidado meticuloso.
A lo largo de más de 50 años de trayectoria profesional, Lance Wyman se ha consolidado como una de las figuras más importantes del diseño gráfico contemporáneo, convirtiéndose en una pieza fundamental para entender la cultura visual contemporánea. Según explicó el arquitecto Javier Ramírez Campuzano, lejos de ser la persona que ideara la imagen (logotipo y diversas aplicaciones incluidas) Wyman solo participó y colaboró como otros profesionales (Beatrice Trueblood y Eduardo Terrazas ) en el proceso, ya este fue contratado como ayudante en el departamento de diseño, realizando trabajos auxiliares.