¿Qué elementos formales seleccionarías de la cultura japonesa para trasladar un trocito de Japón a Manchester mediante el diseño de una imagen de marca? Esta es la pregunta que se hizo, y a la que contestó con su diseño de branding, el equipo de la agencia de diseño Alphabet.
Según cuentan, Cha.ology –una tetería japonesa de reciente apertura en el centro de Manchester– les encargó la creación de su imagen de marca. El objetivo principal de Cha.ology era captar la esencia de la tradición japonesa de una manera limpia, sofisticada y contemporánea, que encajara a su vez dentro del mercado occidental.
Para ello, Alphabet ha trabajado estrechamente con el fundador de la tetería Mei Lee –original de Hong Kong–. Juntos han conseguido una imagen de marca enraizada en la herencia y la tradición japonesa.
El elemento que escogieron para resumir la idiosincrasia japonesa y con el que crearon un sistema visual fue el tatami: «Era importante que la identidad global de Cha.ology estuviera fuertemente influenciada por la cultura tradicional japonesa, enfatizando su faceta más característica de consumidores de té. Encontramos la inspiración en el tatami; una estera colocada en el suelo de las habitaciones japonesas tradicionales. Estas se construyen a base de rectángulos formando una estructura geométrica. Utilizamos esa estructura como base para construir la marca», explican.
Con esto en mente crearon la marca, que se representa con dos rectángulos y un cuadrado. En su interior, el nombre de ‘Cha.ology’ se reparte en bloques. De este modo, se obtiene un logo que permite múltiples posiciones, dando pie a un juego gráfico muy dinámico.
A raíz de esta idea, desarrollaron el resto de soluciones gráficas con el apoyo de un trabajo fotográfico muy cuidado. Una vez establecido el tatami y su estructura geométrica como elemento vertebrador, vieron las posibilidades que ofrecen las combinaciones geométricas. Las aplicaron en las demás piezas corporativas –desde las cartas del menú, pasando por el entorno web, hasta los iconos que explican el proceso de la realización del té japonés– bajo una estética totalmente minimalista.
Para acabar de transmitir con la imagen de marca la tranquilidad que desprenden las tradicionales casas de té japonesas, escogieron para la estética del local una gama de colores neutros, materiales como madera y cerámica, espacios abiertos y grandes ventanales para dejar entrar la luz natural.