Papeles de cine, un juego simbólico bajo la dirección de Atipo

Hacía ya algún tiempo que no teníamos noticias de Atipo. Hoy comprendemos por qué. Y decimos esto tras ver su último proyecto Papeles de cine, en el que han estado trabajando para Minke.
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Raúl e Ismael nos explicaban hace unos meses: «El buen diseño es aquel que no responde sólo a una cuestión estética sino también a ideas o estrategias». Hoy podemos dar muestra de esas palabras con Papeles de cine. Un proyecto en el que encontramos un inteligente juego de significados que, a su vez, el estudio de Gijón ha plasmando físicamente con una excelente ejecución.

Papeles de cine es una campaña promocional para anunciar ‘galería de papeles’, una nueva herramienta de Minke destinada a que los diseñadores encuentren el papel más indicado para sus producciones. El papel se muestra en un contexto inusual hasta convertirlo en icono cómplice a los ojos del espectador.

El packaging diseñado por Atipo consiste en una edición limitada de una exclusiva caja contenedora alberga las 15 fichas originales que incluyen la revisión de títulos ya clásicos como son Dracula, Bonnie and Clyde, La ventana indiscreta, El acorazado Potemkin… y así hasta 15 títulos. La caja tiene esa forma diagonal «en línea con el símbolo de Minke». Este proyecto se complementa con el desarrollo de la página web www.minke.es/galeria/galeriapapeles en la que se muestra la galería de papeles.

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«La idea central para la campaña salió de desechar opciones», nos explican en Atipo. «Últimamente se pueden ver grandes trabajos realizados con papel, con manipulaciones espectaculares y quisimos diferenciarnos, precisamente, por lo contrario. Utilizar el papel de manera muy sencilla y con una manipulación mínima y que este fuese el único protagonista». De ahí la idea de Papeles de cine que juega con la doble acepción. «Por un a lado, ‘papel’, hoja delgada para escribir y personaje que representa un actor. Y ‘de cine’, propio de una película y también como expresión coloquial para decir que algo es magnífico, de calidad».

En cuanto al proceso de trabajo, este «fue muy sencillo», afirman, «en el fondo es lo que se ve, quemar papel con un cigarro, doblarlo, romperlo, etc.». Y puntualizan: «Lo complicado fue encontrar los diferentes conceptos para cada película sin repetir procesos. También fue complicado representarlos de la mejor manera, al ser piezas muy sencillas cada detalle tanto del vídeo como de los carteles tienen que estar perfectamente ejecutados para que se entienda la idea y a la vez se visualicen las características del papel».

Atentos al vídeo con el making of, en el que Atipo muestra plano tras plano, cómo los diferentes papeles llegan a representar un clásico del cine. A nosotros se nos han puesto los pelos de punta.