Cerrar un año siempre es un ejercicio de introspección. Este 2024 ha sido un año extraño, de esos que te ponen a prueba como profesional y como persona. Ha sido un año para aprender, para dar pasos hacia adelante y, también, para enfrentar obstáculos que nos recuerdan lo difícil que es sostener un medio independiente. Pero aquí estamos, gracias a vosotros, los que estáis al otro lado, leyendo estas líneas.
Este año hemos tenido 2,5 millones de lectores, una cifra que en cualquier contexto sería impresionante, pero que cobra aún más valor en un momento donde los medios digitales en general están viendo cómo sus audiencias caen en picado. Además, se han leído más de 11 millones de páginas, algo que todavía me parece una auténtica barbaridad y que no sería posible sin el interés y el compromiso de nuestra comunidad global, con España y México como principales bastiones. Dentro de España, seguimos contando con un núcleo fuerte en Madrid, Barcelona y Valencia. Cada clic y cada minuto que dedicáis a leer es un voto de confianza hacia lo que hacemos.
En redes sociales, hemos apostado fuerte por Instagram, donde estamos a punto de alcanzar los 100.000 seguidores. Me emociona especialmente haber recuperado la conversación en esta red: donde antes había silencio, ahora hay debates enriquecedores. Ver cómo os expresáis y compartís vuestra visión del diseño nos reafirma en que estamos creando un espacio de diálogo y reflexión.
Este año también ha sido testigo de cambios importantes en nuestra estrategia digital. Hemos dejado atrás Twitter y Facebook, plataformas que ya no nos ofrecían ni retorno ni relevancia, y nos hemos centrado en aquello que realmente genera impacto. También hemos visto crecer nuestras suscripciones digitales, especialmente en la modalidad Basic, que casi se ha duplicado. Esto demuestra que cada vez más personas valoran el acceso a contenido exclusivo y de calidad.
Momentos que nos marcaron
2024 no ha estado exento de momentos clave. Algunos de los artículos más leídos giraron en torno a temas polémicos como el logo de la Agencia Espacial Española o las denuncias de abusos en la escuela Brother y agencias de publicidad. Además, seguiremos atentos a las acciones de Fundaciones, Institutos y Asociaciones que, con sus decisiones, impactan directamente en nuestro sector y en la forma en que se gestionan los recursos públicos relacionados con el diseño. Y también, por supuesto, ayuntamientos, comunidades autónomas o diputaciones que siguen haciendo un flaco favor al sector del diseño. Este año ya hemos visto el cambio del Acuerdo Marco, por una licitación única, en el ayuntamiento de Madrid.
Sin embargo, el momento más emocionante fue, sin duda, Designers for Valencia. Lo que empezó como una respuesta solidaria tras la Dana que afectó gravemente a la región, se convirtió en una acción que movilizó a cientos de personas, recaudó miles de euros y generó un impacto que todavía estamos asimilando. Fue tal la avalancha de apoyo y participación que tuvimos que retrasar la revista porque no dábamos abasto para gestionar todo. Ha sido un esfuerzo titánico, pero también un recordatorio del poder de la comunidad cuando nos unimos por una causa.
Por otro lado, este año no pudimos celebrar los Premios Gràffica. La falta de apoyo institucional y privado, unida al enorme esfuerzo que supuso Designers for Valencia, hizo que fuese imposible organizarlos. Confieso que es algo que me duele, porque estos premios son un homenaje al talento y al esfuerzo en el mundo del diseño. Pero no nos rendimos, y espero que en 2025 podamos retomarlos, aunque sea en un formato más modesto.
Retos, cambios y futuro
El 2024 también ha sido un año para reforzar el valor de las voces que enriquecen Gràffica. Daniel Vasallo, con su sección Universo Digital, ha aportado profundidad y análisis en temas cruciales para entender el diseño en la era tecnológica. Desde Argentina, Elina Pérez nos ha ofrecido una mirada imprescindible al panorama del diseño en Latinoamérica, un continente lleno de talento y creatividad. Y, por supuesto, no puedo dejar de destacar el trabajo excepcional de Ana Móliz en la sección de tipografía. Sus textos, llenos de rigor y criterio, siguen siendo un pilar fundamental de nuestra oferta editorial y un referente en el sector.
Nuestra redacción, que en su momento llegó a contar con más de 20 profesionales, ahora está formada por entre 8 y 10 personas y otros tantos de forma externa. No es solo una cuestión de optimización de procesos; también refleja la realidad de un medio que necesita más apoyo económico para sostenerse. La publicidad está en retroceso, y necesitamos más lectores de pago para seguir adelante. Por eso, hago un llamamiento: si valoráis lo que hacemos, si creéis que es importante que exista un medio independiente que denuncie las tropelías del sector, os animo a suscribiros. Sin vuestro apoyo, este proyecto no sería posible.
En 2025, nos esperan grandes retos. El Lab Creativo Cotec, que hemos organizado con una participación abrumadora de más de 250 propuestas, es solo uno de ellos. Este laboratorio es un ejemplo de lo que podemos lograr cuando unimos creatividad e innovación, y estoy seguro de que nos dará grandes alegrías. También espero que podamos retomar los Premios Gràffica y seguir denunciando y visibilizando los problemas que afectan al diseño.
Un nuevo hogar para Gràffica
Este año, una noticia marcó especialmente nuestro día a día: después de 25 años, tendremos que abandonar el espacio que ha sido nuestra casa, nuestra redacción, nuestro estudio. Este lugar, con tanta luz, tantas vivencias y tantas historias, será transformado en un hotel de 5 estrellas. Es una noticia que me llena de tristeza, porque este espacio ha sido mucho más que cuatro paredes; ha sido el corazón de todo lo que hacemos.
Sin embargo, no todo son malas noticias. Hemos encontrado un nuevo espacio a pie de calle que me llena de ilusión. Este lugar será más que una redacción: será un punto de encuentro y un showroom donde podréis venir a visitarnos. Será un lugar abierto, un nuevo hogar donde espero que podamos compartir ideas, proyectos y, sobre todo, seguir construyendo comunidad. Este será, sin duda, uno de nuestros grandes proyectos para 2025.
Gracias por estar ahí, por leer, comentar y apoyar. Seguimos adelante, con más ganas que nunca de contar historias que importen.