El Centro Cultural Recoleta de Buenos Aires ha llevado a cabo un programa de verano para jóvenes que hace especial énfasis en el amor. En este contexto, el encargado de darle vida y color al proyecto ha sido el ilustrador Sebastian Curi, que ha diseñado un mural para la fachada y una exposición en una de las salas. Además, también se han hecho camisetas, carteles, sillones y cojines con tales trabajos.
Teniendo como principal punto de encuentro El Recoleta y Plaza Francia, este mes de febrero será el último en el que se desarrollarán las actividades artísticas y participativas de este proyecto. Entre ellas destacan obras de teatro, performances, muestras, recitales, literatura, música, cine al aire libre, tardes de Hip Hop, ferias de historietas, karaokes, charlas o encuentros para bailar en la plaza. Todas las actividades son con entrada libre y gratuita.
Del mismo modo, el artista también ha cubierto con sus obras la “sala de los abrazos”, en la que, según afirma, trató de crear una experiencia diferente a la del mural. En sus propias palabras, «es un espacio que te rodea y te abraza. La escala de las pinturas y la sala crean una experiencia increíble para los visitantes».
