Ya tuvimos ocasión de conocer en mayor profundidad cómo trabaja Anna Devís y Daniel Rueda en el minifilm de Espacios Creativos. Ahora nos presentan un nuevo e interesante trabajo: Pink a Boo! Se trata de uno de los últimos proyectos de annandaniel, en el que estuvieron jugando al escondite dentro de la Muralla Roja.
Durante tres días, Anna Devís y Daniel Rueda exploraron con su cámara hasta el último rincón de La Muralla Roja, la archiconocida urbanización posmoderna diseñada por Ricardo Bofill en 1968. Con sus fotografías a todo color este dúo creativo nos muestra cómo sería perderse entre los icónicos muros del laberinto rosa, rojo y azul de Calpe.
Como arquitectos y fotógrafos su máxima es la de poner el acento en los edificios que ven todos los días.
«Para ello, retratamos las obras de arquitectura que nos rodean como las auténticas protagonistas de nuestra fotografía, en lugar de relegarlas a un papel secundario donde, desenfocadas y menospreciadas, éstas suelen pasar desapercibidas».
Sin duda, no es el caso de este edificio. La Muralla Roja no necesita presentación alguna, siendo uno de esos pocos edificios que todo el mundo reconoce, le guste o no la arquitectura. Sin embargo, lejos de servir para contagiar la fascinación por sus espacios que comparte todo aquel que la visita, parece que sólo se utilizara como reclamo online de likes y retweets en campañas publicitarias y de marketing.
«Con esta serie de fotografías buscábamos cambiar de una vez por todas esta percepción, mostrando de forma rigurosa pero divertida la belleza de su particular arquitectura a través de un relato visual sencillo inspirado en un juego al que todos hemos jugado en nuestra infancia».
Según nos explican, en su trabajo a Anna y a Daniel les gusta hablar de arquitectura contando historias que caben en un solo fotograma. «Cuando fotografiamos un edificio primero buscamos su rincón más característico para poder después desarrollar un concepto visual coherente con el diseño de ese espacio en concreto. Sin embargo, La Muralla Roja tiene demasiados lugares especiales como para quedarse con uno solo. Por eso decidimos buscar una idea con la que poder jugar por todo el complejo. De esta forma podíamos centrar toda nuestra atención en celebrar todas las perspectivas que se esconden en este laberinto inverosímil de color y geometría», explican.
Ya que sus fotografías se hacen siempre en entornos exteriores, la luz natural es un componente crucial en su obra.
Para este proyecto en concreto decidieron hacer todas las fotografías sólo durante amaneceres y anocheceres con el objetivo de crear una serie de imágenes visualmente coherentes entre sí.
«Así, todas las imágenes disfrutarían de una misma iluminación suave y sutil, a pesar de poder estar hechas en días diferentes. Nos decantamos también por este horario para poder respetar la intimidad y tranquilidad de los residentes de La Muralla Roja, no haciendo fotografías en las horas centrales de luz cuando los vecinos disfrutan de los diferentes espacios del complejo. Al fin y al cabo, no debemos de olvidar que éste sigue siendo un edificio de viviendas privadas cuyos ocupantes han de ser respetados ante todo», añaden.
Sobre annandaniel
Anna Devís y Daniel Rueda son dos imaginativos fotógrafos españoles, nacidos en 1990. Se conocieron en la Universitat Politècnica de València, donde ambos se graduaron en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura. A día de hoy, este dúo creativo utiliza su bagaje arquitectónico para contar historias mediante imágenes divertidas y originales que distan mucho de la fotografía de arquitectura convencional. Su particular estilo se caracteriza por el uso del humor, la creatividad, la precisión y una delicada estética inspirada en la ciudad, la geometría y el minimalismo. Aunque pueda resultar sorprendente o incluso difícil de creer, Anna y Daniel crean estas escenas sin el uso de software de edición de imágenes, sino que las crean meticulosamente en la vida real sirviéndose de todo tipo de objetos cotidianos, localizaciones inesperadas y luz natural.