El colombiano Luis Carlos Tovar reflexiona en Cartografías de Escape sobre la libertad de movimiento partiendo de la situación de los miles de refugiados que en la actualidad llegan a algunas de las principales capitales europeas. Este trabajo recupera las rutas de escape de los errantes africanos en Roma, Civitavecchia, Agrigento y Lampedusa.
PHotoESPAÑA, a través de un jurado internacional formado por expertos en fotografía, ha concedido el Premio Descubrimientos PHE17 al fotógrafo colombiano Luis Carlos Tovar por su serie Cartografías de Escape. Su trabajo será expuesto en la próxima edición del Festival.
Se trata de un proyecto que reflexiona sobre la libertad de movimiento, dando voz a los refugiados protagonistas de los grandes procesos migratorios que se están produciendo en la actualidad y que están rediseñando los mapas de población de las principales capitales europeas.
El jurado del premio Descubrimientos –integrado por Simone Wicca, investigadora, profesora y programadora de Artes Visuales en SESC (Brasil); Rebecca Senf, comisaria del Center of Creative Photography (Estados Unidos) y Ranjit Dhaliwal, comisario y jefe de fotografía de Picfair (Reino Unido)– examinó un total de 190 porfolios presentados en la convocatoria de este año de los visionados celebrados en Lima, Panamá y Dakar dentro de Trasatlántica PHotoEspaña, y Madrid. El trabajo de Luis Carlos Tovar se presentó en el visionado de porfolios que se celebró en Madrid.
El jurado valoró, junto con la calidad del trabajo, el hecho de que tratara un asunto de actualidad, a través de historias individuales, desde un punto de vista sofisticado y poético, pero con final abierto. Cartografías de escape pone rostro a un problema urgente y de escala mundial desde el punto de vista íntimo y personal de sus protagonistas reales y de las crudas historias que están viviendo en las mismas ciudades en las que muchos otros se encuentran ajenos a la lucha diaria de los refugiados.
Sobre Cartografías de Escape
Este proyecto se compone de tres cuerpos de trabajo, aún en proceso de investigación: Mapas de Bolsillo (dibujo y fotografía); Cúpulas Celestes (fotografía); y Baobab (vídeo instalación).
Luis Carlos Tovar comenzó a trabajar en este proyecto en el año 2015, durante una residencia artística en Roma otorgada por el Instituto Italo-Latino Americano. Precisamente fue esta ciudad y las transformaciones que están provocando sobre su mapa la llegada masiva de refugiados, dónde se encuentra la génesis de este proyecto. Tovar retrató y compartió su tiempo con los más de 350 refugiados de Eritrea, Sudán, Gana, Guinea, Palestina, Marruecos, Afganistán y Gambia residentes en el centro Baobab de Roma. Una ciudad que para ellos, es un espacio transitorio, de paso. Tovar enseñó geografía durante un mes y medio en este centro.
A través de la instalación de un mapa del mundo de unos tres metros de largo en el comedor principal del centro empezó a dibujar las cartografías de cada uno de ellos, desde sus lugares de origen hasta los caminos que los condujeron a Roma. Cada semana llegaban nuevos participantes al taller, donde surgió la necesidad de crear Mapas de Bolsillo con orientación a su destino final.
«Las cartografías de escape fueron un conducto para construir las narrativas de sus viajes e invocar la memoria individual en un dibujo». Luis Carlos Tovar
En la segunda fase del proyecto Cúpulas celestes, Tovar recorrió algunas las rutas que había dibujado, haciendo en ferris de carga la ruta entre Civitavechia, Palermo, Agrigento y Lampedusa, persiguiendo, a su vez, las rutas migratorias de las aves. Así Cúpulas celestes es la representación subjetiva de las fronteras y límite de los estados.
La video instalación Baobab es una instalación compuesta por 35 testimonios traducidos al lenguaje de signos en los que los refugiados cuentan las razones que les empujaron a escapar.
Sobre Luis Carlos Tovar
Estudió Artes Visuales en la Universidad de los Andes, con énfasis en Historia y Teoría de la Arquitectura y Urbanismo. Ha participado en varias muestras individuales y colectivas en Buenos Aires, Bogotá, Nueva York, París y China. Desde sus inicios, su trabajo se encaminó hacia la construcción y el cuestionamiento de la memoria histórica a través de instalaciones in-situ.
Sus últimas exposiciones cuestionan la problemática del tiempo y la identidad, dos nociones indefinibles. La fotografía le ha permitido registrar sus intervenciones efímeras en el espacio, en particular aquellas relacionadas con el proyecto Silla Rimax. Proyecto que ha ido paulatinamente transformándose y participado en diferentes escenarios, como en Photoquai 2011 en el Museo Quai Branly y en la Torre Eiffel en París, en el Museo Arte Moderno de Bogotá en el 2012, en Fotográfica 2013 en Bogotá y en el Festival Internacional de Pingyao 2013 en China.
En los últimos años ha trabajado en una forma de crear que se compone del registro de territorios mutables, de geografías, fronteras y orillas efímeras. Se trata de un trabajo que implica el acto de viajar y hacer, y de convertir, como señala Francesco Carreri «de cada recorrido y del andar un acto estético».
Actualizado 26/06/2017