El músico y activista Cat Stevens ha lanzado una nueva versión del considerado himno ecológico de los 70 acompañado de un vídeo musical de animaciones creado por Chris Hopewell y Black Dog Films.
La canción se llama Where Do The Children Play?, y en la actualidad todavía representa la escalofriante realidad del desprecio del mundo por la naturaleza y sus desastrosas implicaciones para nuestro futuro. Fue lanzada en el álbum Tea for the Tillerman, y dejó una gran huella en la conciencia de la generación de los 70. Ahora, 50 años después de su lanzamiento, se espera que cause un efecto similar en la conciencia social, esta vez acompañado por las animaciones de Chris Hopewell.
La canción ha sido utilizada en otras ocasiones con fines activistas. En 2005, Stevens/Islams realizó una versión junto con Dolly Parton en su álbum Those Were The Days. Y en 2017, Garbage grabó una versión de la canción para Music To Inspire: Artists UNited Against Human Trafficking, un álbum solidario creado por Naciones Unidas.
Where Do The Children Play? refleja un fuerte mensaje medioambiental, y el vídeo se centra precisamente en eso. Durante la producción, se ha procurado utilizar materiales reciclados para minimizar el impacto de la producción en el medio ambiente. Para ello, Hopewell y su equipo realizaron una limpieza de playa en el sur de Gales para recoger los desechos de plástico, y han sido reutilizados para crear el océano imaginario que se ve en el vídeo.
Pero en el vídeo no solo el océano esta construido a partir de productos reciclables, prácticamente todos los materiales presentes en el vídeo son derivados de productos reciclados. Por ejemplo, la tribuna sobre la que se construyen los efectos son tablas de andamiaje recicladas y pintadas con pinturas de una tienda local. Además, cuando se terminó la producción del videoclip se ha procurado buscar a todos los materiales utilizados un nuevo uso para contaminar lo mínimo posible.