Las circunstancias actuales no son fáciles para nadie. Especialmente, para los centros de diseño, que se han visto obligados a repensarse y enfocar toda su formación a través de un modelo mixto que combine la presencialidad con lo online. La clave, como todo, pasa por adaptarse. Así lo han hecho en ESAT, donde tienen una metodología puntera en el aprendizaje del diseño gráfico interactivo digital.
Nadie olvidará el final del curso académico de este 2020. Tampoco el inicio del siguiente, que se pincela, sin duda, complejo. En ESAT (Escuela Superior de Arte y Tecnología) afirman que gracias a la experiencia que atesoran pudieron concluir con éxito todos los objetivos del pasado curso mediante una formación telepresencial online. Ahora, dan el pistoletazo de salida poniendo el foco en la seguridad, tanto dentro como fuera de las aulas.
El plan de actuación de la ESAT dispone de varios protocolos: unas normas de comportamiento que deben cumplirse antes de salir de casa, durante los desplazamientos a la escuela y en el propio centro. «Los horarios se han escalonado para evitar las aglomeraciones a la entrada y salida de las clases, creando así grupos burbuja que se diferenciarán por los diferentes colores de las cintas de sus carnets», apunta Antonio Soto, director de estudios de Arte & Diseño de ESAT. Por supuesto, también se están teniendo en cuenta todos los métodos higiénicos necesarios para garantizar un entorno saludable dentro de la institución.
Lo que no ha cambiado ni un ápice en la escuela es su imbatible metodología full immersion.
«El sistema clásico transversal no es el más adecuado para el mundo digital, que tanto propicia la dispersión sobre todo en los jóvenes», comenta Alberto Adsuara, director de Audiovisuales de la escuela. «Los nativos digitales son compulsivos por naturaleza y poco fieles a las cosas que crean una distancia temporal; por eso ven las series televisivas en forma de maratón. Lo que hacemos nosotros es adaptarnos a las nuevas circunstancias y los nuevos tiempos», añade.
El sistema full immersion permite unos resultados «indiscutiblemente mejores», en palabras de Adsuara, al exigir una concentración que acaba siendo muy productiva para el alumnado. Su gran ventaja es que los contenidos de cada asignatura se abordan mediante talleres o workshops, una suerte de cursos intensivos que permiten que, en un tiempo concreto, los esfuerzos de los y las estudiantes se centren en un solo ámbito de trabajo.
«Hemos procurado -y creo que conseguido- que nuestros estándares de calidad en la formación no se resientan a pesar de las circunstancias adversas», menciona Antonio Soto. El arte digital, el diseño, la programación y la tecnología siguen siendo fundamentos de sus programas formativos, donde se profundiza en los aspectos más relevantes de cada área con las mejores herramientas de desarrollo posible.
El mundo cambia, no cabe duda, y hay que adaptarse a los nuevos escenarios. «ESAT ofrece una formación integral decidida a cubrir una demanda que no está siendo atendida», sostiene Alberto Adsuara.
«Ser digital no es estar rodeado de tecnología; ser digital es asumir una forma de vida a la que le queda mucho por explorar».
Alberto Adsuara, director de Audiovisuales de ESAT
«La formación que ofrecemos a nuestros alumnos atiende a un perfil eminentemente creativo dentro de los parámetros inevitablemente digitales del hoy. Son parámetros que contemplan tanto la tecnología (hardware y software) como el contenido (creatividad y ética)», agrega. Por ello, afirma, en la carrera de Arte&Diseño no solo se forma a gente en una creatividad profesional, sino también, por ejemplo, en reflexión y disrupción.
Muestra de todo ello se plasma en los proyectos de fin de curso del alumnado, que «se enfrentan desde su primer día de clase a un sistema formativo encaminado a su rápida inserción laboral en el momento en el que terminen sus estudios» en palabras de Antonio Soto, director de estudios de Arte & Diseño. Los proyectos, así, se plantean como trabajos multidisciplinares en los que, sea cual sea la temática o la técnica elegida, se justifican los conocimientos del alumnado en diferentes ámbitos del diseño como la identidad corporativa, el packaging, la tipografía, la ilustración, el diseño editorial o la realidad aumentada, entre otros.
La metodología full immersion de ESAT permite aproximarse a una materia durante un tiempo intensivo para adquirir todas las habilidades necesarias. Es un sistema que, en momentos adversos como los actuales, resulta incluso premonitorio: tenemos que explorar todo cuanto nos rodea con presteza para enfrentarnos a los retos de futuro que no son, precisamente, pocos. Y tenemos que hacerlo en esos nichos que sabemos que se van a demandar cada vez más. Quedarse atrás no es una opción. En ESAT, no cabe duda, arrancan el curso con buen pie.
→ ESAT.