El proyecto editorial con aires reivindicativos de Lúa Climent busca demostrar los efectos dañinos de las redes sociales en los jóvenes.
Las redes sociales han conquistado nuestro día a día. La vida se desarrolla a caballo entre dos planos: el mundo real y el mundo virtual, dentro de nuestros dispositivos. Devota busca analizar el punto de inflexión que se genera entre ambos, mediante una publicación editorial y una campaña de marketing de guerrilla.
El proyecto de Lúa Climent Gómez, estudiante de Grado en Diseño y Tecnologías Creativas en la Universidad Politécnica de Valencia, nace tras analizar el comportamiento de la generación Z y la generación Millennial en una de las redes sociales de moda del momento: Instagram. Su componente adictivo y las sensaciones negativas que ocasiona motivan la creación de Devota.
Este proyecto editorial se apoya en una publicación titulada Insta-victims. #Likes, postureo y una perfección inexistente. Este libro, de más de cien páginas, se divide en varias secciones relacionadas con redes sociales y hábitos de consumo: Manifiesto, Perfil de los encuestados, Perfil público/privado, Auto-likes, Publicaciones guardadas, Contenidos publicados, Filtros faciales y Reflexiones.
Dejando de lado todas las ventajas que nos brinda el mundo digital, el objetivo de Insta-victims es recoger las voces de personas pertenecientes a estas dos generaciones, centrándose en cómo perciben sus propias conductas en redes sociales. Para llevar a cabo el proyecto Lúa ha desarrollado una encuesta dirigida a cien jóvenes, donde se les pregunta por sus hábitos en Instagram.
“Esta publicación pretende iniciar un debate sobre dónde acaba nuestra vida en el plano físico, y dónde empieza en el plano virtual”
Lúa Climent
La búsqueda de validación externa y likes, el uso abusivo de filtros, la carencia de un espacio íntimo en internet, la necesidad de mostrar una falsa imagen de bienestar. Son algunos de los problemas que reflejan los carteles de Devota.
