Ayer se puso a la venta el número dos de la revista ¡Mússica! la hermana menor de Gràffica que habla de un tema para «mayores».
PalauGea, la editorial de Gràffica, acaba de lanzar el número dos de la revista ¡Mússica! Al igual que las revistas de Gràffica, ¡Mússica! es una revista temática que entiende la música como una manifestación cultural de la sociedad que nos rodea.
«La revista de música que no (solo) habla de música» en su segundo número escoge el sexo como eje conductor y a lo largo de sus 144 páginas desarrolla un ejercicio de diseño editorial que habla al tiempo de fantasía y realidad, de exceso y contención, de brillo y saturación.
biblioteca tipográfica
Para la maquetación de la revista se han utilizado cinco tipografías diferentes, dos tipografías se usan principalmente para texto. Stratos, de Yoann Minet es una grotesca geométrica que replantea los conceptos de peso y ancho con un juego de oposición entre la caja alta y la caja baja.
Las mayúsculas tienen una aspecto condensado, propio de las tipografías de madera del siglo XX, mientras que las minúsculas tienen las proporciones geométricas clásicas de las tipografías sans serif. Cuando se emplean juntas en un texto el aspecto es inesperado pero sorprendentemente funcional, gracias al espacio y el peso cuidadosamente equilibrados.
La otra tipografía para texto que se utiliza en la revista es Eiko, de Pangram Pangram, una serifa elegante y refinada que ofrece el contrapunto al riesgo y jugueteo de Stratos. Sin embargo, cuando el diseño requiere grandes titulares, Eiko se nos descubre como una tipografía tan caprichosa y moderna como su contraparte sin serifa. Con curvas donde curvas se requieren y angulos afilados donde no se esperan, sus serifas desvelan una brutalidad moderna.
Sporting Grotesque de Lucas Le Bihan, editada por la fundición francesa Velvetyne, también tiene un papel destacado en este proyecto editorial. Utilizada para textos de tamaños medios (pequeños titulares y grandes destacados) es justo así como podemos disfrutar de sus ángulos caprichosos, sus curvas imposibles y el contraste entre sus trazos gruesos y los que no son tanto.
Balboa de Jim Parkinson es la tipografía escogida para los excesos. Componer a un cuerpo 900 palabras como amor o sex es una declaración de intenciones, y sirve, a lo largo de la revista para dividir contenidos y delimitar secciones, para dar un descanso al lector y a la vez ofrecer un impacto visual.
Balboa también es la tipografía con la que se creó la cabecera de ¡Mússica!, esta vez con un juego entre la caja alta, la caja baja y los signos de exclamación.
En este número 2 de ¡Mússica! hace un cameo la tipografía Häus Mono de Arilla Type, una monoespaciada geométrica y robusta que se usa para los titulares en la primera galería fotográfica de la revista.
fotografía
Diseñar con fotografías a toda página es un placer, sobre todo con según qué fotografías. Y nos queda claro que para los editores de ¡Mússica! la fotografía es un elemento primordial desde la misma portada desplegable, con una fotografía que se extiende a modo de tríptico por portada y contraportada.
Con fotografías o con textos, la revista se lee y se mira en vertical o en horizontal
La revista incluye las tres secciones fotográficas que ya se pudieron ver en el número uno de ¡Mússica! dedicado a la Revolución. Para darle a las imágenes la oportunidad de brillar, estas tres secciones coinciden con tres pliegos impresos con papel brillo.
Más fotografía extraordinaria es la que acompaña la entrevista a Zahara, con una atrevida sesión fotográfica exclusiva en la que la cantante «se desata».
paleta de color
El gama de color utilizada en la revista viene marcada por la fotografía de portada. El color naranja (0+71+86+0) predomina a lo largo de las páginas, sin embargo, viene acompañado por una gama que actúa como co-protagonista.
Utilizado en párrafos de texto a color que salpican las páginas, otras veces utilizado como fondo en páginas que vuelven a funcionar como divisoras y organizadoras del contenido en esta revista. Esta vez no para darnos un descanso en la lectura sino para dirigir nuestra atención a canciones, libros o películas que amplían nuestras miras, nuevos puntos de vista, reflexiones o creaciones alrededor del sexo, el tema central de esta revista.
Con pequeños iconos que representan canciones, libros o películas se indican contenidos adicionales que enriquecen la lectura.
vista, oído, tacto y olfato
Esta revista ha confirmado con su segundo número que con su ortodoxia gráfica es un ejemplo heterodoxo de la nueva hornada de publicaciones «plataforma» que resultan un híbrido entre la revista y el coffee table book. Con contenidos transversales y con un eje vertical temático, sus artículos y reportajes son más contemporáneos que actuales. Pero que no cunda el pánico porque para contenidos de actualidad y alimento diario ¡Mússica! cuenta con su propia plataforma digital mussica.info y una más que activa cuenta de Instagram.
Pero aquí venimos por el olor y el tacto que proporciona la experiencia editorial. Porque aquí todos sabemos a lo que huele el papel, y es el olor que disfrutamos cuando compramos un libro o una revista. Sin embargo, ¡Mússica! está concebida como una revista digital impresa, una revista plagada de códigos QR, y códigos de Spotify (fantástica idea y diseño) que funcionan como trampolín desde el que abrirnos a nuevos sentidos.
Actualizado 02/12/2022