La ilustradora y diseñadora Ana Linde, nos trae en forma de artículo su experiencia de haber sido la diseñadora que ha llevado a cabo el cartel del documental sobre Carlos Saura: ‘SAURA(S)’
Hace meses recibí un encargo de esos que hacen mucha ilusión: diseñar el cartel de Saura(s), documental de Félix Viscarret sobre la figura de Carlos Saura, producido por Pantalla Partida e Imval.
Mi cabeza se llenó de escenas de películas que he visto y requetevisto (descubriendo cosas nuevas cada vez) a lo largo de mi vida: Ana Torrent cantando en silencio Por qué te vas, José Luis López Vázquez habitando como adulto su recuerdo de niño, Cristina Hoyos danzando con la muerte… Imágenes que son historia del mejor cine español. Y en mi cabeza también los carteles de esas películas, historia de nuestro diseño, muchos de Cruz Novillo.
Era todo un reto, pero tenía algunos puntos a mi favor:
– Conocía el proyecto donde se enmarca la película: Cineastas Contados (directores jóvenes retratan a directores consagrados estableciendo un diálogo intergeneracional) y ya había trabajado para él, en gráfica de pre producción y festivales.
– Conocía el cine de ambos directores.
– Era público objetivo, conocía a quién mi cartel llevaría a las salas.
– Tenía acceso a la película –aún sin terminar– y sabía el enfoque que Félix Viscarret había elegido para contar a Saura.
– Compartía con Saura, sin saberlo, la manía de pintar fotos que hila el documental (a lo que él llama fotosaurios) y esto definía un estilo gráfico.
Mientras veía la película (en proceso de montaje) surgieron varias ideas: el cazador cazado, el retratador retratado, el juego de espejos, hacer hijos y películas, crear. Tracé los primeros bocetos: retratos manipulados de Saura, la cámara como extensión de la mirada, Viscarret a contraluz como parte del juego. Al final nos quedamos el fotosaurio con Las Meninas, una imagen del propio Saura que lo condensa todo: el autor mira a los ojos del espectador, el espejo refleja algo que no está en escena.
Tuve que repintar la imagen por asuntos técnicos: imitar un Saura que imitaba un Velázquez, pero era coherente. «En el cine todo es mentira», dice el director durante la película, y la frase resultó clave para el cartel.
Siguiendo con el juego de espejos e inspirándome en algunos diseños de Cruz Novillo para el cine de Saura, había hecho más bocetos:
– Un mosaico de siete imágenes compuestas con su rostro y el de cada uno de sus hijos (como en Elisa, vida mía).
– La imagen de Saura, que cumple 85 en la película, y debajo la de sus siete hijos mirándole (como en Mamá cumple 100 años).
Se descartaron pero mantuvimos la elección de una tipografía sobria, en blanco sobre negro, y la composición del texto en bloque, al estilo de Cruz Novillo en Ana y los lobos, Los ojos vendados o Stress es tres, tres.
¡Cómo me gustaría hacer un viaje a finales de los 70 y colarme en la conversación entre Saura y Cruz Novillo donde nació alguno de esos carteles, tan arriesgados como el cine que representaban, y tan actuales! Este tándem cineasta/diseñador demuestra cómo crecen los proyectos cuando el talento se suma, en colaboración.
Espero que el cartel invite a ver Saura(s), una película valiente que habla de lo que no se deja agarrar: Carlos Saura, la emoción, la creatividad. Y espero seguir hablando de diseño y cine con Cruz Novillo y otros dos grandes cartelistas actuales: Sergio González Kuhn (Barfutura) y Natalia Montes (User T38), en la mesa redonda que se celebrará en diciembre en la Facultad de Bellas Artes de la UCM.
