El presidente del COE, Alejandro Blanco, ha dado la cara y ha comparecido ante los medios. En declaraciones a EFE, el alto cargo ha restado importancia a la polémica suscitada por el uniforme que la delegación española lucirá en los Juegos de Londres. Así mismo ha recordado que no solo tendrá coste cero sino que, además, aportará financiación.
«No se podían hacer las cosas de otra manera, nadie puede entender que el Comité Olímpico Español pague la ropa, que era lo que se hacía hasta ahora. No me imagino ni al Real Madrid ni al Barcelona pagando por llevar la ropa, y aquí sí se hacía», afirmaba Blanco en Móstoles, donde ha visitado las obras del Palacio de los Deportes ‘Andrés Torrejón’. Según Blanco, en otras circunstancias, la ropa para estos Juegos -mil equipaciones- habría costado 1,7 millones de euros a las arcas del Estado.
Así mismo, Alejandro Blanco ha apuntado que se ha negociado desde 2010 hasta 2016 con una empresa que quiere invertir en el sur de Europa y utiliza el COE como «punto emblemático». «La ropa la da gratis, la produce gratis, un año y medio de producción, y encima patrocina al COE con una cantidad anual que va directamente a la oficina de atención al deportista y a los programas de educación y a los que tenemos con las federaciones», ha añadido el mandatario deportivo.
Ha recordado que España ya ha llevado esa ropa a otras competiciones «y nunca ha habido polémica». «Se genera la polémica dos meses antes de los Juegos cuando es imposible cambiar el diseño», ha destacado. Si los diseñadores españoles quieren colaborar en el futuro el COE estará «totalmente encantado» de aceptarlo, dijo. «Pero no podemos cambiar algo que tenemos, que es patrocinio, empresas que quieran invertir en España, en el deporte español y ahorrar dinero al deporte y al gobierno español». Que una empresa haga esto y apueste por el deporte español «siempre es un milagro, pero en estos momentos es mucho más».
Para finalizar, Alejandro Blanco ha mostrado su confianza en que cuando la delegación española haga su entrada en el desfile inaugural, que ya no estará abanderada por Rafa Nadal, todo el mundo se centre «en lo que realmente importa: los Juegos y la participación de los deportistas».
Puntualizaciones y reflexiones
Señor Blanco, a nosotros tampoco nos cabe en la cabeza este hecho. Claro que ni el Barça ni el Real Madrid pagan su equipamiento. Todo lo contrario, a los clubs y a los deportistas las marcas de primer nivel les pagan, porque saben el filón que tienen a la hora de asociar su imagen, traduciéndose en cifras millonarias de merchandising. Pero por supuesto, tanto el Barça como el Real Madrid saben lo importante que es gestionar estos asuntos hasta llegar a un acuerdo favorable.
Tan sólo tiene que mirar a su alrededor y ver qué han hecho otros países a la hora de desarrollar la imagen que van a llevar sus deportistas y exportar a todo el mundo. En el caso de EEUU, ha sido Ralph Lauren quien se ha hecho cargo del diseño del equipamiento olímpico. En Italia, sus deportistas irán vestidos con diseños de Armani. Mientras que el equipamiento inglés llevará la firma de Stella McCartney. Incluso, Jamaica, un país con menor repercusión y presuspuesto tiene un uniforme más acorde a su imagen, diseñado por Cedella Marley (hija de Bob Marley)
El hecho de que una marca ponga su punto de mira en el deporte español no debería sorprenderle, señor Blanco. La marca no es tonta y sabe que en contraprestación va alcanzar una notoriedad y una difusión de ámbito mundial que de otra forma le sería bien imposible o le supondría desembolsar un importante presupuesto.
Así mismo, debería comprender que el hecho de que la marca ofrezca la ropa gratis no conlleva dejar a expensas de un criterio que se desconoce el diseño de la imagen que se pretende comunicar.
El milagro no es que una empresa apueste por el deporte español, el milagro sólo se produciría después del día 27 de julio si finalmente y tras el bochorno que tendrá que soportar el equipo olímpico español en el desfile en Londres y durante la celebración de los Juegos, el Comité Olímpico Español se decide a encarar la imagen de las próximas Olimpiadas con seriedad, criterio y profesionalidad.
