En colaboración con Domestika.
Juanma Carrillo se ha convertido en uno de los nombres imprescindibles en la escena musical española; pero no como músico, sino como realizador de videoclips. Preciosismo, mimo, naturalismo, componente emocional son las claves del magnetismo que emanan sus vídeos musicales. Además, Juanma Carrillo es un experto en la realización de vídeos musicales low cost, como explica en el curso que imparte en Domestika. Hoy nos habla de sus 10 videoclips imprescindibles.
Juanma Carrillo puede presumir de haber visto su trabajo junto al de fotógrafos tan sobresalientes como Nan Goldin, Sophie Calle o Wolfang Tillmans. Si bien se ha hecho famoso por sus vídeos musicales.
Las piezas de Juanma tienen un halo muy especial, como podemos ver en sus trabajos para La Casa Azul y La Bien Querida, para quien firmó la trilogía Premeditación, Nocturnidad y Alevosía, entre otros artistas. El erotismo, la reflexión en torno a la soledad y la búsqueda del otro son su sello particular.
Hoy Juanma Carrillo nos muestra aquellos trabajos de otros realizadores que admira y sus fuentes de inspiración a través de este Top 10 de sus videoclips imprescindibles.
Kendrick Lamar, Alright (2015). Dirigido por Colin Tilley
Además de rapero y genio musical, Kendrick es un gran artista en lo audiovisual. La denuncia social y el arte están muy presentes en su trabajo. Siempre está en continua experimentación, trabajando nuevas tecnologías y técnicas FX con las que llega al gran público; algo muy difícil de conseguir.
Mykki Blanco, High School Never Ends (2016). Dirigido por Matt Lambert
A modo de minipelícula, este videoclip se mueve entre dos extremos: violencia y amor a partes iguales; algo que en otros tiempos hubiese sido inimaginable difundir sin la ayuda de YouTube. Mykki Blanco es un artista total, y este videoclip es el mejor ejemplo de ello. Una auténtica «joya para enmarcar», según comenta Juanma Carrillo.
Jamie XX, Gosh (2016). Dirigido por Romain Gavras
Si hablamos de clásicos modernos, este trabajo de Romain Gavras es una excelente muestra. Al igual que sucedía en los 90 con realizadores como Michel Gondry, Chris Cunningham y Anton Corbin cuya parte de éxito llegó en la dirección de videoclips, Romain Gavras retoma esta tradición en este complejo trabajo para Jamie XX. Muy recomendable también el vídeo de cómo se hizo.
M.I.A., Born Free (2010). Dirigido por Romain Gavras
Y si hablamos de Romain Gavras, no podemos dejar de hablar de este videoclip firmado para M.I.A. y que no estuvo exento de polémica. Este trabajo nos da una dimensión de hasta dónde se puede «ilustrar con una canción». De hecho, YouTube lo retiró al poco de subirlo a la plataforma por la extrema dureza de sus imágenes. Como resultado, el videoclip se convirtió en un fenómeno viral. Importante mencionar que este trabajo de Gavras fue una versión musical de su película Notre jour viendra. Y a modo de recomendación, Juanma Carrillo nos remite también a Borders, dirigido por la propia M.I.A.
The Shoes, Time to Dance (2012). Dirigido por Daniel Wolfe
Este es uno de los videoclips que Juanma Carrillo siempre muestra en sus cursos. Su capacidad de impacto es total. En el mismo se mezcla un poco de todo lo visto en los anteriores: «sonidos, cine, juega con el uso de la canción y sobre todo desvirtúa el propio texto y estilo de la canción, para llevarlo a otra cosa», explica. El realizador también destaca otra baza a su favor, la importancia de contar con un personaje de la escena indie o un actor de la talla de Jake Gyllenhaal, como es el caso, «dejándose la piel en una especie de continuidad punk y macabra de aquel extraño personaje de Donnie Darko», aclara.
Territoire, Blanc (2013). Dirigido por Pedro Martín-Calero
Rodado en Madrid, este trabajo de Pedro Martín-Calero es uno de los realizadores que ha permitido mostrar fuera de nuestras fronteras el gran nivel que hay en España. A través de un juego de efectos y composición, el realizador construye «un mundo extraño que te atrapa y que de alguna forma se adelantó a la moda 4/3 y el retorno de todo lo orgánico (el grano, los colores desaturados, etc.)», afirma.
Scissor Sisters, Invisible Light (2010). Dirigido por CANADA
CANADA no podía faltar en esta lista. Y este videoclip para Scissor Sisters es del que Juanma Carrillo siente «orgullo patrio». En un ejercicio perfecto, CANADA une la metáfora visual y el ritmo, todo ello salpicado de surrealismo. «Lo que consiguieron con este clip fue acercar al mundo de forma encubierta (digamos inspiracional) al cine más experimental y a la estética de Buñuel, Berlanga, Saura o Erice, sin perder un ápice de esa personalidad que ya habían demostrado experimentando en sus clips para casi todos los grupos patrios más interesantes», aclara el realizador.
Paolo Nutini, Iron Sky (2014). Dirigido por Daniel Wolfe
Cada vez más el mundo del videoclip está más cerca del cine que del brillo de las coreografías. «En este caso, al documental», afirma Juanma Carrillo. «O cómo mostrar miserias y dolor no está reñido con calidad y difusión». En el vídeoclip se tratan «temas tabúes como el suicidio o la religión y tan poco glamurosos como la pobreza o las adicciones». El trabajo está lleno de referentes.
Kanye West, Fade (2016). Dirigido por Eli Linnetz
Mr. West, es como Kendrick Lamar, otro gran megalómano que cuida hasta el extremo todo lo que hace. En este caso, la bailarina Teyana Taylor consigue que «se lleve el ritmo a su cuerpo (literalmente) con una coreografía memorable», dice. Y consigue «una estética retro (los 80 americanos y la estética del gym) y un erotismo casi vulgar, hace que no puedas dejar de mirar la pantalla, sea cual sea tu tendencia sexual».
Indochine, College Boy (2013). Dirigido por Xavier Dolan
Como sucedió en el caso de M.I.A, en YouTube ha habido otros videoclips que han sufrido la censura de la plataforma. Entre los favoritos de Juanma Carrillo está el de la canción de Brendan Maclean House of Air. También el estupendo This is America de Childish Gambino. Pero para su número 10, el realizador escoge «otro vídeo de denuncia social, que muestra con arte, pero de nuevo con crudeza la lacra del bullying escolar», afirma. «Está dirigido por el enfant terrible canadiense Xavier Dolan, y su desenlace plantea un buen debate ético sobre la hipocresía de nuestra sociedad».