¿Pagarías por bañarte en el mar? Pues algo así ha conseguido la campaña Sea Tickets creada por la agencia TBWA/Helsinki para concienciar y recaudar fondos para preservar el mar Baltico.
El mar Báltico, somero y frágil, se enfrenta a un desafío grave en forma de contaminación, disminución de los niveles de oxígeno y floraciones de algas verde-azuladas. En respuesta, el Grupo de Acción del Mar Báltico (BSAG) introdujo una iniciativa revolucionaria: “Sea Tickets” (Entradas al Mar), una nueva manera de cuidar de el mar.
Estamos acostumbrados a comprar entradas de admisión para piscinas, transbordadores o incluso carreteras. Los ingresos de estas entradas ayudan a mantener nuestra infraestructura compartida. ¿Por qué no participar también en el bienestar del mar?
BSAG introdujo máquinas de venta de entradas del mar Báltico que recorrieron las playas más populares y las ciudades costeras más grandes de Finlandia durante el verano. La idea era captar a las personas cuando realmente estaban disfrutando del mar, ya sea nadando, navegando o pescando. La campaña logró un aumento del 93% en el número de donantes privados en comparación con la campaña anterior de BSAG.
“El mar Báltico tiene un significado especial para los finlandeses de muchas maneras. Tenemos decenas de miles de lagos, pero solo un mar. Más del 40% de los finlandeses viven en la zona costera del mar Báltico. Estas eran las personas a las que queríamos llegar”, dice Mikko Kaivo-oja, director creativo del proyecto.
Los amantes del mar tenían la opción de comprar entradas de un solo día o de temporada a través de un mecanismo de donación integrado a través de la aplicación de pago más popular de Escandinavia. Las entradas también estaban disponibles para su compra en línea y dirigían a la audiencia a aprender más sobre la conservación marina.
Tanto las máquinas como las entradas eran respetuosas con el medio ambiente y estaban hechas de materiales reciclables. El diseño de las máquinas de venta de entradas encarnaba valores respetuosos con el medio ambiente. Compuestas por múltiples componentes, estas máquinas de venta de entradas eran portátiles y estaban diseñadas para un uso a largo plazo.
La campaña atrajo una amplia atención mediática durante el verano, con artículos en periódicos importantes, emisiones en canales de radio nacionales y presencia en programas de televisión matutinos. Los medios ganados alcanzaron a más de 10 millones de personas (la población de Finlandia es de 6 millones), con un valor de medios ganados que superó los 100.000 €.
El éxito del programa no solo tuvo un impacto destacado y recaudó una cantidad significativa de dinero para la conservación marina, sino que también tiene el potencial de replicarse en ciudades costeras de todo el mundo.