El logotipo de una organización es uno de los elementos del branding que definen mejor su identidad. Por ello, los partidos políticos deciden en ocasiones modificarlo en campaña electoral, para que este se corresponda con el lema de la formación en una etapa tan determinante. El problema nace cuando optan por los mismos recursos estilísticos, que acaban así con una personalidad propia.
Esta vez, el camino hacia las elecciones del 28 de abril está lleno de nuevos corazones. Con ellos, una imagen optimista –y poco original– llena algunos de los logos de las formaciones que aspiran a optar al gobierno en menos de dos meses.
En el caso del PSOE, el logo histórico y sólido del partido se ha sometido a un cambio de color –o más bien de tonalidades de rojos– y se le ha incorporado un corazón. La formación liderada por Pedro Sánchez presentó su nueva imagen de campaña a finales de febrero; una imagen que a muchos les ha recordado el trabajo de Paula Scher para Heart & Stroke Foundation.
En la “novedosa” imagen, a sus conocidas siglas acompañan a un corazón. Ambos están separados por una barra lateral. Este logo va de la mano con el mensaje La España que quieres.
Por otra parte, ya a principios de año el Partido Popular marcó un hito en la historia de su branding. Marta González, la vicesecretaria de Comunicación de la formación, presentó su nueva marca, Populares. Esta imagen fue creada aprovechando la convención nacional que se celebró en Madrid en enero. El partido remarcó que convivirá con su identidad clásica, y que no sería una sustitución.
Actualmente se puede ver en las redes sociales de la formación conservadora, como en el encabezado de la cuenta oficial de Twitter de Pablo Casado.
En este caso, la mítica gaviota del partido se convierte en un semi-corazón. En algunas partes, en vez de ser blanco, esta mitad del símbolo acoge los colores de la bandera de España.
Sin embargo, la moda del corazón no es algo nuevo. Podemos apostó por él en la campaña electoral de las elecciones de 2016, cuando se presentó junto a Izquierda Unida como Unidos Podemos. En Gràffica, analizamos esta simbología de la unión de partidos de la izquierda.
Aunque ambas formaciones han confirmado que para el 28A volverán a presentarse juntas, aún se desconoce si cambiarán el logo o reutilizarán el de los últimos comicios.
Ni el PP ni el PSOE han aclarado el mensaje de la presencia del corazón. Una posible interpretación sería que este símbolo refleja unión y cordialidad en una época donde Vox se ha sumado a la lucha por el poder como fuerza política. Por otro lado, en una campaña electoral donde las redes sociales tienen un gran peso, el corazón podría reflejar el like típico de las publicaciones. En el caso particular de Unidos Podemos, este muestra la inclusión del género femenino y masculino.
En definitiva, un símbolo repetido en partidos con ideologías diferentes acaba con la heterogeneidad de la imagen política, la cual es determinante para sus respectivos sectores de votantes.