Como parte de un proyecto llamado 36 Days of Type el artista del grafiti que se hace llamar Nase Pop está creando pinturas callejeras en las que juega con la tipografía, el color y el volumen, en la mayoría de ocasiones, ficticio.
Durante 36 días de creatividad sin descanso todo el que quiera puede aportar su visión personal de la tipografía. En 36 Days of Type se reta a los participantes a diseñar una letra o número cada día hasta generar un alfabeto completo, dando lugar a una imagen global sobre la capacidad de representar un mismo signo desde muchas perspectivas diferentes.
En el caso de Nase Pop emplea colores fuertes para romper las formas de las letras. En sus murales emplea la técnica de pintura del trampantojo que consiste en que las letras generan la ilusión de tener relieve y salirse de la pared, y en algunos casos, en realidad están en 3D.
Aunque se llama Daniel Stroomer, desde 1995 firma sus grafitis como Nase, su apodo de barrio en Amsterdam. Significa “nariz” pero nunca entendió el porqué de ese sobrenombre, él dice que no es especialmente narigón. Luego de un tiempo le agregó POP (Pirates On Probation), la referencia a un grupo de amigos con los que solía pintar. Así se formó el nombre de este artista de origen holandés que hoy vive en Buenos Aires, y que quiere hacer evolucionar el street art.
Pop ya creaba de manera activa murales de grafiti antes de comenzar con este proyecto de las tipografías. La fotógrafa Alejandra Leston se ha encargado de retratar al artista callejero en una serie de fotografías donde revela su proceso de elaboración del mural, con sus latas de pintura en aerosol y sus brochas usadas.
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