Michiyo Yasuda, la diseñadora de color de Studio Ghibli quien le ha dado color a algunas de las mejores películas del estudio japonés de animación, fallecía el pasado miércoles a los 77 años.
Yasuda trabajó durante cinco décadas en la industria de la animación. Directores como Isao Takahata, Hayao Miyazaki o Mamoru Oshii contaron con su trabajo en la creación de cortometrajes y largometrajes de animación, vídeos promocionales, series de dibujos animados, documentales e incluso en piezas de publicidad.
Como diseñadora de color, Michiyo Yasuda elegía el cromatismo de todos los elementos y personajes de una obra de animación. Su principal herramienta para contar una historia era el color. Dependiendo de la estrategia que empleara, la pieza audiovisual, sus escenas y personajes adquirían una personalidad u otra, transmitían emociones, estados de ánimo, etc. Es por ello, que Yasuda acabó aportando una de las características más representativas y distintivas de las piezas del Studio Ghibli.
«El color tiene significado y hace que sea más fácil entender la película. Los colores y las imágenes pueden mejorar la película sea cual sea la situación en pantalla», declaraba en una entrevista en Los Angeles Times.
Entre su filmografía se encuentran películas como Hols: Prince of the Sun (1968), Panda! Go, Panda! (1972),m Castle in the Sky (1986), My Neighbor Totoro (1988), Pom Poko (1994), Princess Mononoke (1997), Ponyo (2008), The Wind Rises (2013), Kujiratori (2001), Mizugumo Monmon (2006), Pandane to tamago hime (2010), entre otras.