El maquillaje 3D de Inès Alpha

Inventar el maquillaje del futuro, este es el propósito de Inès Alpha. La artista digital parisina descubrió las tecnologías 3D y los programas CGI, trabajando como directora de arte para marcas de belleza y de lujo en una agencia publicitaria. Un día, decide continuar su camino sola. Miles de videotutoriales de Youtube después, Inès Alpha traza los primeros esbozos de una nueva práctica que consiste en agregar elementos 3D a rostros humanos y que en última instancia, se convertirá en una nueva disciplina: el maquillaje 3D.

Lejos de la estética gamer que ha caracterizado durante mucho tiempo la creación 3D, Inès Alpha dirige el maquillaje digital hacia influencias de las culturas drag queen y cyber-punk. Texturas holográficas, relieves geométricos o formas orgánicas en movimiento, sus máscaras digitales aplican una capa virtual fantástica y encantada a nuestros rostros, empujando las fronteras del maquillaje. 

Para evangelizar al público con su visión y su arte, Inès Alpha acude rápidamente a los filtros de las redes sociales de realidad aumentada en Snapchat e Instagram, accediendo así, a millones de usuarios. Una manera de conquistar nuevos fieles al maquillaje del futuro. Hablamos con Inès Alpha de su experiencia como creadora de estos filtros faciales.

Te especializaste en creación 3D, ¿cómo diste el paso hacia la realidad aumentada y que posibilidad te ofrecen los filtros de las redes sociales?

Cuando empecé a diseñar maquillajes 3D la Realidad Aumentada no era tan accesible técnicamente. Mi objetivo era transcribir visualmente mi visión artística del maquillaje del futuro, de la manera más realista posible, como si ya estuviéramos allí. Cuando más real parezca, más estará integrado en lo tangible y más inquietante será. 

Trabajaba esencialmente en post-production. Es decir que aplicaba mis diseños 3D a videos previamente grabados. Sin embargo, me frustraba no poder ofrecer la posibilidad de llevar mis creaciones a todo el mundo. 

Cuando descubrí Lens Studio, el programa de Realidad Aumentada desarrollado por Snapchat y más adelante Spark AR de Instagram, fue evidente para mí que los usaría para democratizar mi arte y mi visión. El resultado es todavía menos impresionante que en la post-producción pero la tecnología avanza rápidamente y el maquillaje del futuro está cada vez más cerca.

Inicialmente, los filtros se usaban más que nada para perfeccionar los rasgos o divertirse con máscaras extravagantes. Vemos aparecer una generación de creadores que usan el filtro como medio artístico. ¿De dónde viene este movimiento?

Creo que a uno como artista le gusta hacer uso de un nuevo medio. Por lo que es lógico que tantas personas se hayan arrojado en brazos de la experimentación con los filtros, sobre todo viendo la visibilidad que ofrecen. 

La gente está cada vez más obsesionada con el reflejo de sí misma. Es una especie de segundo avatar que muestra a su público digital. Ya sea a través del maquillaje clásico, de técnicas más elaboradas o de cirugía plástica para los más privilegiados, hay un deseo de modificar su apariencia, de transformarse y de crear una ilusión. Los filtros de Snapchat, de Instagram o las aplicaciones de retoque tipo Facetune, son solo una continuidad lógica de este fenómeno. Son estas transformaciones digitales las que me fascinan.

Hasta ahora las redes sociales servían sobre todo como canales de auto-promoción. ¿Qué opinas de Instagram como canal exclusivo de creación?

Instagram ha sido claramente la red privilegiada para mostrar mi trabajo. Sin ella no tendría la visibilidad que tengo hoy en día. Pero sin embargo no me gusta mucho la idea de canal “exclusivo”. Sobre todo cuando se trata de una aplicación de Facebook que recupera nuestra información y nuestras imágenes. 

Tengo curiosidad de ver el desarrollo de otras redes. Lo que es muy frustrante con Instagram y específicamente con la creación de filtros, es que muchos creativos se involucran gratuitamente. Producimos contenido, pero más allá de la potencial visibilidad no hay ninguna forma de remuneración. Estaría bien que se creará un sistema como Youtube en el que recibiéramos una remuneración en función de las descargas de nuestros filtros. Pero por otro lado eso podría influenciar la creación ya que mucha gente se deja influenciar por la búsqueda de la notoriedad, del like y del follow

¿Qué crees que esta tendencia visual dice de nuestra relación con la belleza, de nuestra relación con el cuerpo? ¿Crees que la era de la belleza perfecta deja sitio a una belleza surrealista y transhumana?

El ser humano siempre se ha obsesionado por la juventud y la belleza eterna, pero hoy en día los estándares de belleza son cada vez más difíciles de alcanzar. Los filtros permiten cumplir con estas fantasías fácilmente. 

En mi caso, diseñar una belleza surrealista me permite salir de la belleza tradicional. Con el 3D puedo crear un nuevo mundo inspirador y divertido, un mundo sin códigos. ¡Propongo una visión de la belleza futurista y sin complejos! 

ines.alpha

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