David Carson no es un tipo fácil. Se presentó con una camisa a cuadros, unos minutos antes de entrar en escena como cabeza de cartel del MAD MMX, sin tener acabada la presentación [de ahí el desbarajuste de su exposición] y con poca idea de cómo funciona su propio ordenador.
Su actitud es siempre como de que no pasa nada. Que todo va bien. Debe ser la actitud que tienen las estrellas que saben que pase lo que pase siempre acaba siendo un éxito todo lo que hacen. Viajar en Business y alojarse en hoteles de 5 estrellas debe ayudar a tener la cabeza tranquila.
Se le nota ‘viejuno’, como dirían los de Muchachada, pero con la seguridad de que es un líder que sabe de lo que habla. Sabe cómo se mueve la mente humana, no en vano es sociólogo. Pero sobre todo sabe hacer su trabajo de diseñador con impronta. Sabe que tiene un estilo casi único que todo el mundo ha intentado copiar pero nadie ha conseguido igualar ni superarle.
Para conseguir una entrevista con él hay que pelearse con la organización, los fans, otros medios, el tiempo, el cambio horario… al final, lo conseguimos. Gracias al jet lag, para él eran las 14.00 para nosotros eran las 21.00h, estaba todavía con fuerzas.
Después de esperar a que firmara autógrafos y se hiciera fotos con sus fans, conseguimos sentarlo en la sala de prensa del Palacio de Congresos, ponerle un café con leche, y empezar con las preguntas:
¿Cómo definirías tu trabajo?
He leído en algún sitio que lo que hago es deconstructivismo. Eso es lo que yo hago.
¿Tus trabajos son prácticamente ilegibles? ¿Por qué?
Por supuesto, tengo que decir que no es verdad. Mis trabajos no son ilegibles. Puedes leerlos. Quizás una o dos cosas de las que he hecho en toda mi carrera puede que no se puedan leer, pero cuando te mueves alrededor del rock&roll, música, surf, skate, boarding, snow-boarding… estas cosas te piden un tipo de presentación o lenguaje visual que refleje el deporte o la música. Una revista de rock&roll no debe tener el aspecto de una revista de golf.
Así que todo lo que se dice alrededor de la legibilidad no es lo que importa. Cuando la gente está interesada en algo, en su deporte favorito, en su grupo de música del que es un verdadero fan, ellos leen. Tal vez sea más dicífil de leer, pero el tema no es si es más o menos fácil de leer únicamente. He elegido una tipografía, una composición, un color… centrarlo todo en si se puede o no leer no es lo importante.
¿Cómo ves tu trabajo comparándolo con el de Neville Brody?
Bueno, yo nunca he sentido similitud con el trabajo de Neville. Él fue alguien que se estaba convirtiendo en grande cuando yo estaba apenas empezando, ya que como sabéis el diseño fue mi segunda carrera.
Yo vi su trabajo en Face, pero no puedo decir que estuviera bien hecho, es decir, no estaba fascinado por lo que hacía. Él hacía increíbles revistas culturales mientras que yo estaba centrado en publicaciones sobre surf o skate, o sea, que nuestros trabajos son bastante diferentes. Él hacía cosas dibujadas a mano en los titulares, era antes de los ordenadores y me parecía interesante.
Respeto mucho su trabajo y a él, pero creo que no fue una gran influencia en mi trabajo. Yo estaba muy ocupado haciendo lo que hacía y no estaba muy interesado en otras cosas, sobre todo porque no recibí una educación en una escuela de diseño, sino en escuelas de arte y mis influencias eran otras.
¿Cuál es la diferencia para ti entre arte y diseño?
Mucho diseño gráfico diría que esta al mismo nivel que las bellas artes. La línea que las separa es muy difusa. A mí me gusta trabajar en ese área borrosa entre arte y diseño. Al principio, en Estados Unidos, a los que se dedicaban al diseño les llamaban ‘artistas comerciales’, y después en los años 40 ó 50 se llamaron ‘artistas gráficos’ y entonces los diseñadores decidieron llamarse ‘diseñadores gráficos’ y después ya eran ‘diseñadores gráficos’ en letras mayúsculas, incluso algunos se llaman ‘arquitectos de la información’.
En cualquier caso, ahora yo creo que somos más ‘artistas gráficos’ otra vez y que es un término mucho más apropiado.
¿Cómo un sociólogo acabó siendo diseñador gráfico?
Sí, el diseño gráfico es mi segunda carrera. Yo hice sociología y luego estuve dando clase durante más de 5 años. Durante el verano, cuando no daba clases, un día cogí un flyer que anunciaba un taller sobre diseño gráfico. Esa era la primera vez que yo oía esa palabra, tenia 26 años, y el flyer decía algo así como ‘ven y conviértete en un diseñador gráfico’ y pensé, ¿esto es una profesión? ¿Puedes ganarte la vida con esto? Y pensé que era divertido e interesante, así que fui con el flyer a la escuela, les dije que si había algún problema en que un profesor de sociología hiciera esto, me dijeron que no, y empecé el taller.
Después de dos semanas, que era lo que duraba el taller, dije: Wow! Esto es lo que quiero hacer! Lo tuve claro. Entonces decidí dejarlo todo. Dejé de dar clases, y dejé el surf (hay que recordar que Carson estuvo en el top 10 de los mejores surfistas del mundo), toda la energía que había puesto en ser un surfista profesional durante años la dirigí hacia el mundo del diseño gráfico. Y empecé con los contactos que tenia en el mundo del surf a hacer pequeñas cosas de publicidad y luego revistas y al final de algún modo volví a dedicarme a lo que había dejado que era el surf. Cerré el círculo.
¿Recuerdas tu primer trabajo en diseño gráfico?
Sí claro. El primero fue un rótulo para un restaurante por el que me pagaron 25 dólares o algo así. No sé si el restaurante sigue abierto.
¿Y el último? ¿El proyecto en el que estás ahora?
Estoy haciendo un montón de trabajo con Quiksilver otra vez, y también estoy haciendo ‘rebranding’ para la marca de alta fidelidad Bose. Estamos intentando mejorar la imagen de marca, tiendas, packaging, los anuncios, un poco de todo, para sus clientes más jóvenes. Pero es un proceso muy lento, y se tardará en ver los resultados.
¿Cuáles son tus tres tipografías preferidas?
Me gustan Franklin Gothic, Trade Gothic Condensed 18, y una llamada Neulan, que hice yo para Miles Newlyn que es un gran tipógrafo londinense.
¿Conoces la ola de Mundaka?
Sí claro, es esta [le habíamos preparado una foto por si no la conocía]. Es muy famosa. Ahora que estoy haciendo cosas por Francia con Quiksilver igual me bajo con mi tabla.
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