La Agencia de Prevención y Lucha contra el Fraude y la Corrupción de la Comunidad Valenciana ha lanzado una advertencia que podría tener repercusiones significativas en el sector de las fundaciones que reciben financiamiento público. Enfocándose en la Fundación ELLIS Alicante como caso paradigmático, Antifraude ha instado a replantear el estatus de entidades que, pese a ser consideradas privadas, dependen fuertemente de subvenciones gubernamentales.
La agencia respalda informes de la Dirección de Abogacía de la Generalitat que sugieren que entidades como ELLIS Alicante, el Centro Internacional para la Investigación del Envejecimiento y el Valencian Graduate School and Research Network of Artificial Intelligence (valgrAI), deberían ser consideradas de «naturaleza pública debido a que reciben de forma recurrente subvenciones nominativas públicas que constituyen su principal fuente de financiación»
Las Fundaciones que no tienen fondos propios, ni son capaces de generarlos, y que su único fin es recibir fondos públicos para su funcionamiento tanto a nivel estructural -sueldos y gastos corrientes-, como para la realización de actividades, «deben convertirse en una entidad pública, similar a una sociedad instrumental, para seguir recibiendo dinero de la Generalitat»
El cambio propuesto implicaría un mayor escrutinio sobre la gestión de fondos y decisiones internas, ya que al convertirse en parte del sector público instrumental, los órganos de dirección serían designados por el Gobierno valenciano.
Una Fundación privada, por muy loable que sea su actividad, si no tiene fondos propios para desarrollar su actividad y solo se financia por parte de la administración o se convierte en pública o trabaja en el libre mercado como todas las demás entidades privadas.
Este llamado de atención no solo señala a la Fundación ELLIS, sino que envía un mensaje claro al conjunto de fundaciones que operan de manera similar. Joan Llinares, director de la Agencia, destaca «la importancia de corregir estas prácticas para preservar la transparencia y el buen uso de los recursos públicos.»
La situación financiera controvertida de ELLIS Alicante, sirve como un recordatorio de la necesidad de una mayor supervisión en el sector. Antifraude, al inadmitir la denuncia sobre ELLIS, subraya la urgencia de abordar estas cuestiones y tomar medidas concretas para regularizar la situación de fundaciones que operan en el límite de la legalidad.